La confianza del consumidor estadounidense aumentó en enero de 2024, alcanzando su nivel más alto en dos años. Este aumento fue impulsado por una serie de factores, incluyendo una inflación más lenta, la anticipación de tasas de interés más bajas en el futuro y condiciones de empleo generalmente favorables.
Detalles:
- El Índice de Confianza del Consumidor del Conference Board subió en enero a 114.8, frente a un 108.0 revisado en diciembre.
- El aumento se observó en todos los grupos de edad, pero fue mayor entre los consumidores de 55 años o más.
- Las evaluaciones de la situación actual aumentaron en enero, impulsadas por opiniones más positivas sobre las condiciones comerciales y la situación del empleo.
- Las expectativas de los consumidores para los próximos seis meses aumentaron ligeramente, debido al pesimismo cada vez menor en torno a las condiciones comerciales futuras, el mercado laboral y las perspectivas de ingresos.
- Las expectativas de que las tasas de interés aumentarán en el año se desplomaron a sólo el 41.5%, mientras que las de inflación promedio a 12 meses cayeron al 5.2%, el nivel más bajo desde marzo de 2020.
- Los planes de compra de automóviles, viviendas y electrodomésticos caros disminuyeron ligeramente en las tres categorías.
- La valoración de los consumidores sobre la situación financiera actual de su familia fue más positiva en enero, y se mantuvieron optimistas al calificar la situación financiera esperada de su familia, dentro de seis meses.
- La probabilidad percibida por los consumidores de una recesión en Estados Unidos durante los próximos 12 meses, siguió disminuyendo en enero.
Implicaciones:
El aumento de la confianza del consumidor es una señal positiva para la economía estadounidense. Un consumidor más confiado es más propenso a gastar, lo que puede conducir a un aumento de la demanda y del crecimiento económico.
Sin embargo, es importante señalar que la confianza del consumidor puede ser volátil. Los factores que pueden afectarla incluyen la inflación, las tasas de interés, las condiciones del mercado laboral y las perspectivas económicas generales.
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Por lo tanto, es probable que la confianza del consumidor continúe fluctuando en los próximos meses, a medida que evolucionen las condiciones económicas.
