En un contexto de incertidumbre por la pandemia del coronavirus y la economía, cinco altos ejecutivos de empresas de tecnologías de la información y la comunicación, con operación activa en la Argentina, se animaron al desafío planteado por iProfesional de trazar una hoja de ruta de acción para este año en este sector, uno de los más dinámicos pese a la crisis de la Covid-19.
Entre otros puntos, coincidieron en destacar la profundización de los procesos de transformación digital y la necesidad de apostar más por la educación en TIC. Los participantes, quienes respondieron por separado ante este medio, fueron:
- Guillermo Ocampos, socio fundador de Together Business Consulting, una consultora en transformación de negocios con oficinas en Buenos Aires, Santiago de Chile, Montevideo y Sao Paulo.
- Esteban Zecler, cofundador y CEO de Zetech, empresa especializada en mejorar el acceso a la información de las organizaciones y empresas con tecnología de vanguardia.
Pedro Sandalis, gerente regional para América del Sur en Nutanix, una empresa de software en la nube informática. - Javier Minsky, CEO de Virtualmind, compañía argentina dedicada al Software, con 15 años de experiencia.
- Aníbal Carmona, CEO de Unitech, una empresa de software y servicios informáticos que brinda herramientas cognitivas de transformación digital.
El potencial de la Argentina
Ocampos afirmó que en Argentina «existe un gran potencial alrededor de las empresas basadas en el conocimiento». «La pandemia aceleró el proceso de innovación y el salto tecnológico asociado, como también la necesidad de adoptar sus productos y servicios. Hay muy buena capacidad y talento», destacó.
Para el socio de Together, «no es novedad la tasa exponencial de crecimiento del comercio electrónico, un enorme canal que las nativas digitales explotaron al máximo y obligó a compañías más tradicionales a sumarse».
A la vez, el foco en plataformas de pago «está revolucionando el mercado financiero, entre tantos otros avances», dijo Ocampos, para quien «la aceleración es para todas las industrias, incluso para las que venían más rezagadas».
Al respecto, advirtió que «las leyes deben acompañar los procesos, dar seguridad legal y previsibilidad a las inversiones, y entender que estamos en un mundo de alta competencia, donde no estamos solos y competimos con otros países para atraer inversiones que nos den competitividad y trabajo de calidad».
Zecler señaló que la modalidad del «home office», de una manera «obligó» a que «las empresas se digitalicen». Recordó que «el primer gran impedimento con la pandemia fue la entrega de recibos de sueldos, luego el ingreso de nuevos empleados, y la imposibilidad de acceder a documentación física que quedaron en las oficinas».
Esto aceleró el interés en la transformación digital. «Empresas grandes y pequeñas comenzaron a interesarse por nuevas tecnologías que permitan tener toda la documentación en la nube». Y resaltó «la importancia de la descentralización de la información, el hecho de poder acceder desde cualquier lugar a un repositorio de documentos», señaló Zecler.
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