Según publica el portal Hi Retail
La recuperación de 2023 se ha visto lastrada por los efectos de la inflación y por las incertidumbres geopolíticas. Pese a ello, el cliente se ha mostrado dinámico y las ventas en los centros comerciales han crecido levemente. El consumidor post pandemia se ha mostrado menos fiel, más orientado al precio y menos marquista. Uno de los sectores que ha mostrado mayor recuperación ha sido el ocio, lo que demuestra el ánimo del cliente a vivir experiencias y su disposición a consumir.
2024 se presenta con no menos incertidumbre. Esta situación ya parece asumida por el cliente, quien seguirá consumiendo con normalidad mientras la inflación y la subida de tipos se lo permitan. Los centros comerciales tienen el reto de fidelizar a un cliente más volátil. Pocos tienen todavía la posibilidad de captación, por lo que la fidelización será clave para mantener o aumentar ventas, incidiendo más en el ticket medio que en la generación de visitas. Por otro lado, y vista la tendencia al ocio del consumidor actual, hay que dotar a los centros comerciales de experiencias, aportando más valor añadido a la visita frente a la comodidad de la compra online.
En definitiva, 2024 tiene que enfocarse a la fidelización y a la experiencia de compra de un consumidor cada vez menos fiel y más orientado al ocio.
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