Propietarios de vehículos y conductores deben hacer conciencia de lo necesario que es para una ciudad mantener el parque automotor en buen estado. Cada año los propietarios de vehículos deben matricularlos y llevarlos a una revisión técnica para que las autoridades de tránsito aprueben si estos pueden rodar por las calles del país sin provocar ningún peligro a su conductor o a terceros.
Sin embargo, pese a ser un deber mutuo -autoridad y propietario-, en Guayaquil, con corte al 26 de diciembre de este año, todavía estaba pendiente de matriculación al menos el 60 % del parque automotor (aproximadamente 690.000 vehículos), según datos de la Autoridad de Tránsito y Movilidad de Guayaquil (ATM).
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Esta situación representa un riesgo para la seguridad vial y la salud pública de la ciudad. Los vehículos que no están matriculados ni han pasado la revisión técnica tienen más probabilidades de presentar fallas mecánicas que pueden causar accidentes, además de emitir más contaminación ambiental.
Para reducir esta problemática, la ATM ha implementado una serie de medidas, entre las que se incluyen:
- Incrementar la fiscalización de los vehículos que circulan sin matrícula o que no han pasado la revisión técnica.
- Ofrecer descuentos y facilidades de pago para incentivar a los propietarios de vehículos a matricularlos y llevarlos a revisión.
- Sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de mantener el parque automotor en buen estado.
Estas medidas han tenido un impacto positivo, pero aún queda mucho por hacer. Los propietarios de vehículos deben asumir su responsabilidad y matricular sus vehículos y llevarlos a revisión técnica en el tiempo establecido. De esta manera, contribuirán a mejorar la seguridad vial y la salud pública de Guayaquil.
Con información de El Universo
