Según la publicación del portal La Vanguardia
Más allá de las pop-up, esas tiendas que están durante varios días en una ubicación y después desaparecen del lugar como si se tratara de un circo ambulante, el modelo de negocio de Shein es cien por cien digital, un ecommerce a lo bestia. No tiene tiendas físicas y tampoco parece que las quiera tener. Es un e-tailer puro.
Pero ha surgido algo inesperado. En México han aparecido tiendas físicas no autorizadas de esta marca que se dedican a comprar ropa en esta página web china para después revenderla, explica el profesor Pablo Foncillas. El modelo consiste en comprar grandes volúmenes de ropa y luego venderlas en sus boutiques físicas.
El modelo consiste en comprar grandes volúmenes de ropa y luego venderlas en boutiques propias
«Pero es importante subrayar este dato. No son pop-ups de la marca ni tienen ninguna relación con Shein más allá de que la ropa que venden es la misma. Solo se dedican a revender su ropa», insiste el investigador.
¿Qué esconde esto? México es un país con buena penetración de internet, pero poca fuerza de la compra online. La baja confianza, la moderada bancarización, el uso del efectivo y la gestión logística pesan. «Por estos factores, prevalece la venta física por encima de la online en mayor medida que en otros países», señala Foncillas.
¿Cambia la relación de la tienda física e internet está cambiando? La respuesta, en la conclusión del profesor.
