Perspectivas del comercio electrónico en América Latina para 2024, en el panorama del comercio electrónico para el año 2024 en América Latina, diversas tendencias y proyecciones marcarán la evolución del sector.
Entre ellas, se destaca el aumento significativo del uso de pagos electrónicos e instantáneos por parte de los consumidores, una mayor penetración de compras transfronterizas, especialmente de bienes de origen asiático, y la incorporación de nuevas funcionalidades y aplicaciones basadas en inteligencia artificial (IA).
Además, se espera una expansión en la oferta de servicios de mercado, como créditos, programas de fidelización, reembolsos y contenidos, junto con una creciente conectividad.
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Según las proyecciones de Payments and Commerce Market Intelligence, se anticipa un incremento del 22% en el comercio electrónico en América Latina entre 2023 y 2026, alcanzando un volumen estimado de más de US$700.000 millones. En Brasil, el mercado líder en línea, la cámara de comercio electrónico ABComm estima un aumento del 10,4% en los ingresos por ventas en línea, superando los 205.000 millones de reales (aproximadamente US$42.000 millones) en 2024.
Las ventas transfronterizas en Brasil han experimentado un notable crecimiento del 150% en los últimos cinco años, con un enfoque destacado en minoristas asiáticos como Shein y Shopee. En México, la asociación local de comercio electrónico AMVO informa un sólido avance, con ventas digitales que alcanzaron los 528.000 millones de pesos (aproximadamente US$31.000 millones) en 2022, representando un aumento del 23%.
En el caso de Colombia, la cámara local de comercio electrónico (CCCE) proyecta un progreso del 17% en las ventas totales de bienes y servicios en línea para 2024. A pesar de las expectativas iniciales de una caída del 13% en las ventas minoristas en línea en 2023, se prevé un repunte del 8% este año.
A pesar del crecimiento, persisten desafíos logísticos, especialmente en la última milla. Fernando Gambôa, socio de KPMG, señala que, a pesar de los avances en logística, aún hay espacio para evolución, especialmente para atender a comunidades aisladas. La conectividad también se destaca como un factor clave para facilitar las compras en entornos digitales.
En términos de pagos, se espera un aumento en la madurez de las tarjetas de débito y crédito, aunque algunos países aún enfrentan desafíos en comparación con las transferencias en cuenta corriente. Además, los pagos electrónicos instantáneos, como PIX en Brasil, ganan terreno, y la tendencia «Compre ahora, pague después» (BNPL) se espera que crezca, con predicciones de alcanzar US$52.500 millones en volumen de transacciones entre 2023 y 2028.
Las redes sociales, especialmente TikTok e Instagram, emergen como vitrinas de comercio electrónico y canales de comunicación en el «comercio social». La inteligencia artificial se integra para detectar fraudes y analizar datos, mientras que algoritmos avanzados se vuelven más presentes en el desarrollo de productos y en avances tecnológicos, incluyendo mejoras en la logística.
El comercio electrónico en América Latina continuará su ascenso en 2024, con un enfoque en superar desafíos logísticos, ampliar la conectividad y aprovechar las tecnologías emergentes para proporcionar experiencias de compra más avanzadas y personalizadas a los consumidores de la región. Según publica Bnaméricas
