Pagantis funciona como un método de pago convencional a la hora de hacer una compra online. Es decir, aparece entre las opciones de pago cuando acaba el proceso de compra. El consumidor elige el número de cuotas en las que quiere pagar y tras rellenar un breve formulario con datos básicos, su tecnología analiza diferentes variables para determinar si la solicitud es apta o no.
La ventaja de esta fintech frente a otros métodos de financiación es su inmediatez, ya que no requiere papeleos. “La respuesta es inmediata, en cuestión de segundos desde que se solicita la financiación”, explica Rolf Cederström CEO y cofundador en una entrevista con MERCA2.
“Su valor diferencial es la aprobación instantánea y 100% online, que se lleva a cabo en tiempo real mediante un innovador algoritmo de scoring”. Este algoritmo analiza el riesgo de fraude y de crédito, apoyándose en el big data y en técnicas de machine learning, con el objetivo de asegurar la mayor aceptación posible controlando siempre el riesgo de morosidad de cada financiación.
Entre sus competidores, están las entidades financieras que emiten créditos al consumo como Cofidis, Cetelem o CaixaBank Consumer Finance. Y, por otro lado, las startups más pequeñas como Sequra o Payin7 con productos similares. Aunque estos “no tienen una licencia o sistema regulatorio para operar en el mercado” detalla.
Además, se enfrenta a grandes players del ecommerce, como pueden ser Amazon o Alibaba que ya han comenzado a mostrar su interés en soluciones fintech. O Facebook que cuenta con una licencia para introducir epayments en Europa, concretamente en Irlanda. Pero para Pagantis esto supone una gran oportunidad, ya que podría traducirse en acuerdos de colaboración con este tipo de compañías.
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