Según la publicación del portal ModaES
España fue uno de los pocos mercados europeos donde la penetración de la moda online continuó creciendo, acercándose a la media europea con un 37,9%. En la UE, la cuota se sitúa en el 38,2%.
El ecommerce de moda se encuentra con su techo después del salto durante la pandemia. Tras arañar un punto de penetración en los últimos tres años, el número de europeos que compran ropa a través de Internet no sólo ha dejado de crecer, sino que ha retrocedido levemente en 2022, según datos de la agencia estadística Eurostat. España, todavía por debajo de la media, ha sido una de las excepciones donde la penetración ha seguido subiendo.
El 38,2% de los europeos compró ropa, calzado o accesorios a través de la Red en 2022. Un año antes, la cuota era del 38,5% y, en 2020, de apenas el 33,5%. El dato no es estrictamente comparable con los de anteriores a 2019, ya que hasta esta fecha la categoría incluía ropa y artículos deportivos. Ahora incluye ropa (incluyendo deportiva), calzado y accesorios.
Antes del estallido de la pandemia, la penetración había registrado un salto notable, pasando del 34,9% de 2018 al 37,7% de 2019, pero en 2020 se moderó debido a la contracción generalizada del consumo (no es que menos europeos compraran online, sino que directamente no compraron).
En 2021, con las continuas restricciones al comercio físico, consumidores que hasta entonces no habían comprado online dieron el salto. Pero esa incorporación de nuevos clientes parece haberse frenado el año pasado. De confirmarse la tendencia en 2023, el ecommerce habría entrado en una nueva fase de madurez, donde el crecimiento ya no vendrá de la captación de nuevos clientes, sino del aumento orgánico de las ventas.
El caso no es exclusivo de la moda: en sectores como el mobiliario y artículos de hogar (una de las estrellas del confinamiento); los libros, periódicos y revistas; los ordenadores y los artículos deportivos, la caída de la penetración supera un punto porcentual en 2022.
En cambio, la penetración del conjunto del comercio sí continuó arañando cuota, llegando al 74,6% en la Unión Europea, frente al 74,4% de 2021 y el 72,7% del año anterior. El avance se debe fundamentalmente al incremento de la cuota en la compra de entradas para eventos culturales, billetes de transporte y entradas a espectáculos deportivos, tres sectores que prácticamente desaparecieron durante la pandemia.
Pese al descenso, la moda continúa siendo, de lejos, el artículo con mayor penetración, es decir, el que más europeos compran por Internet, con cuotas que oscilan entre el 14% y casi el 60%.
Las mayores cuotas se registran en Países Bajos, Irlanda, Noruega, Dinamarca y Suecia, donde más de la mitad de la población ha comprado ropa a través de la Red durante el último año. En el otro extremo se encuentran Montenegro y Bulgaria, con menos del 20%; Rumanía, Italia y Letonia.
España continúa por debajo de la media europea, aunque está cada vez más cerca y, a diferencia de lo que ocurrió en el conjunto del continente, la cuota continuó aumentando en 2022, hasta el 37,99%, lo que le sitúa por delante de países como Finlandia, Polonia o Malta.
En términos absolutos, las ventas de ropa y calzado en España se incrementarán un 7,8% este año, según datos de Euromonitor, hasta 4.714,2 millones de euros. El dato supondrá el 17,4% del total de ventas de moda. La cuota continuará elevándose hasta 2026, aunque a un ritmo cada vez menor, y encontrará su techo en torno al 20%.
