De acuerdo al portal de noticias Sitio Andino, Con otro envío, el papel moneda de $2000 llega a comercios de Mendoza
El Banco Central giró una segunda remesa para recargar cajeros el fin de semana. Cuántas unidades del nuevo papel moneda salieron a circulación el último mes.
De a poco se empieza a ver en circulación. Pese a que el Tesoro sigue con la distribución a cuentagotas entre los bancos que no alcanzan para terminar de cargar unos 300 cajeros automáticos, el flamante billete o papel moneda de $2000 se cuela entre los comercios, la cartera de la dama y el bolsillo del caballero de Mendoza.
Según datos brindados por el sector bancario, el Banco Central ya envió un total de $250 millones en dos remesas. Una primera a comienzos de junio ($100 millones) que sirvió para una prueba inicial de los cajeros o ATM, que se completó con un segundo envío ($150 millones) para asegurar expendio este fin de semana que incluye la conmemoración de Día de la Independencia.
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Basta tomar el dato parcial de disponibilidad del nuevo papel moneda desde que empezó su emisión y distribución, y ponerlo en contexto para saber si lo que hay es poco o mucho.
En concreto, cargar la totalidad de los ATM repartidos en toda la provincia requiere de alrededor de $1.200 millones. Eso significa que hasta el momento circula en Mendoza apenas 20% de todo lo necesario para llenarlos, y por ende, atender la demanda de los consumidores/usuarios bancarizados.
Si bien desde el BCRA estimaban a fines de mayo que en no más de 40 días sería de uso corriente, según indicaron desde la gremial Bancaria la carga representa 1 de cada 4 «caseteras» o bandejas que componen cada módulo bancario. Equivale a 2 mil billetes, o sea, $4 millones por cada cajero.
A fines de junio, ese surtido de billetes apenas alcanzó para que el Banco Nación afrontara, en parte, el operativo de pago de sueldos a la administración pública el viernes 30.
«Varios ya pagan con $2000»
Con todo, la nueva remesa de $150 millones permitiría cargar al menos 5 ATM para atender la demanda del fin de semana.
Lo dicho: pese a no es fácil de encontrar, a la hora de pagar la imágen de los médicos Ramón Carrillo y Cecilia Grierson empieza a verse en los comercios del Gran Mendoza.
«Ayer vino una persona y pagó una compra con el (nuevo billete) de $2000. Era el primero que recibimos. Y se nos fue el mismo día en un vuelto» dice risueña, del otro lado del mostrador, la jóven encargada de un drugstore céntrico con centro de cobro de impuesto Rapipago incluído.
Para otros comerciantes, si bien falta para ver una circulación masiva del nuevo papel moneda, empieza a volverse de uso corriente.
Al frente de un almacén con verdulería sobre calle Godoy Cruz, así lo ve Álex, mientras muestra uno, lo palpa y rescata lo que considera llamativo, como su sello de agua entre otras características. Hasta comparándolo con el billete que le sigue en denominación, el clásico «hornero» de $1000.
Para el comerciante, los incipientes usuarios «son clientes que venían de cobrar o hacer una extracción por cajero y pasaron a hacer sus compras. Ya tenemos varios».
Cuántos hay en circulación
Por su parte, aunque el ritmo sea lento frente a lo que demanda la economía, sobre todo la micro, la del consumo, la participación del reciente papel moneda crece en participación en el mercado total de billetes en circulación.
Si se toman los 12,3 millones de unidades que se habían emitido hasta el 16 de junio según el registro del Banco Central, el dato es claro: el volúmen de papeles de $2000 se duplicó en el lapso de dos semanas.
Por su escaso volúmen circulante (representa sólo 1,5% del total de billetes corrientes que están en manos del público y los bancos), el nuevo papel moneda está último en cantidad. Se ubica en el extremo opuesto al de $1000, que sobre 8.165 millones ocupa la mayor cuota, con un 45%.
Mientras se espera mayor fluidez en la circulación del de $2000, el presidente del Banco Central de República Argentina (BCRA) confirmó que, a más de un año de anunciarse, en agosto saldrá el nuevo billete de $1000 con la figura del prócer José de San Martín. Si bien viene a reemplazarlo, en principio convivirá con el actual con el clásico «hornero naranja».
