La caída del consumo argentino atraviesa un proceso de desaceleración en los autoservicios de hasta 500 metros cuadrados y supermercados de cercanía. Según un informe de Focus Market, la situación se está equilibrando y estiman que se registrará un crecimiento del 3,8 % en el último trimestre de este año en comparación con el mismo trimestre de 2020.
En un año en que el consumo cae de manera sostenida, en octubre las cifras fueron “positivas” ya que retrocedió un 0,4% en comparación con el 5,3% de septiembre que se registró de baja en el consumo argentino. El acumulado 2021 -enero a octubre- deja un saldo negativo de un 8,6%.
Por su parte, Camilo Tiscornia, director de C&T Asesores Económicos, aseguró que el panorama respecto al consumo es “de debilidad y poco dinamismo”.
En este sentido, indicó que “las causales de este repunte responden al reparto de plata del Gobierno que seguramente hizo efecto en algún sector, a lo que se le suma la reapertura de sectores que se encontraban cerrados.
“Tiene que ver más con la dinámica del covid y no con que la macroeconomía sea pujante”, afirmó.
«Para llegar a esta instancia los motores del consumo privado se realizaron desde el Gobierno nuevos ajustes salariales en paritarias, incremento del salario mínimo vital y móvil, planes sociales como eje para intentar incrementar el PBI y el humor social.
El efecto de incrementar el gasto público y déficit fiscal volcando mayor cantidad de pesos en el mercado tendrán como consecuencia en los próximos meses una aceleración en la variación de pesos restringiendo consumo futuro.
Aún queda emisión por delante tanto en noviembre como diciembre para pagar intereses de letras y financiar al tesoro sumado a la corrección de precios relativos de la economía pendientes» expresó Di Pace
Mayor repunte del consumo en el interior de Argentina
En base a lo que se puede observar de este 2021, el consumo argentino cae tanto en la región metropolitana como en el interior.
Sin embargo, las tasas negativas del último mes desaceleran la caída en zona metropolitana, mientras que, en el área del interior se registra la primera variación positiva del año.
Esto es así porque la pandemia “pegó mucho más fuerte” en lo que es Capital Federal y el primer cordón del conurbano bonaerense.
En este orden, se expresó Alfredo Schclarek Curutchet, economista investigador de CONICET e investigador asociado de la consultora Equilibra, y explicó: “gran parte del interior es muy dependiente del agro.
Por lo que, al estar alto el precio de los commodities, están pasando un buen momento económico”.
Discrepancias sobre los niveles de consumo argentino
Respecto a el hecho de poder llegar a los niveles de consumo prepandémicos, el economista dijo que “antes del inicio de la cuarentena el consumo venía creciendo, y si bien vamos repuntando, todavía no hemos llegado a aquellos niveles”.
Tiscornia coincidió y vaticinó que “con suerte” a fin de año alcanzarían el consumo prepandémico. “La temporada de verano será buena pero tampoco es un indicador homogéneo en relación a todo el país”, dijo.
En contrapartida, el investigador Curutchet no estuvo de acuerdo, y afirmó que el nivel de actividad está por encima de la prepandemia y que la economía se recuperó gracias al aumento del consumo y del comercio exterior –principalmente las exportaciones-.
“Aumentó el consumo principalmente porque bajo el desempleo y el subempleo respecto de la época de la pandemia”, sostuvo a PERFIL.
