Bodegas argentinas en su temporada más crítica

Bodega

Las bodegas argentinas se enfrentan a una difícil temporada marcada por una serie de desafíos que han llevado a un pronunciado declive en sus operaciones. Entre enero y agosto, las exportaciones de vino cayeron un alarmante 21%, mientras que las ventas en el mercado interno también se redujeron en un 13%. Esta situación se debe a una combinación de factores, siendo las condiciones climáticas adversas una de las principales causas que condujeron a una de las peores cosechas en la historia vitivinícola del país.

La falta de volumen de producción se vio agravada por una menor demanda, atribuida a la disminución del poder adquisitivo de los salarios en la población. Sin embargo, el sector vitivinícola encuentra un respiro en el aumento de los precios internacionales, que contribuye a mitigar el impacto de la caída en las ventas.


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En lo que respecta a las exportaciones, los datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) revelan que las ventas de vinos embotellados sufrieron una reducción del 21.7% durante los primeros ocho meses del año. Esto se traduce en una disminución de 28.2 millones de litros de vino exportados, equivalente a una pérdida de USD 94 millones para las bodegas exportadoras.

Por otro lado, en el mercado interno, se observa una disminución del 13.1% en las ventas de vino embotellado, lo que equivale a una reducción de 44.5 millones de litros. Incluso el vino en cartón, uno de los envases más populares en el mercado local, experimentó una disminución del 8.9% en volumen vendido.

Uno de los factores determinantes en esta situación es la escasa producción de vino en el año debido a condiciones climáticas desfavorables, como la falta de lluvias y eventos climáticos extremos. La baja oferta ha impulsado el aumento de los precios del vino, superando incluso la inflación general, lo que ha afectado aún más la capacidad de compra de los consumidores. En este contexto, el vino, especialmente en los segmentos medio y alto, se ha vuelto un bien no esencial, lo que contribuye a la caída en las ventas en un período de pérdida de poder adquisitivo de los salarios.

Con información de Mariano Salazar de Infobae

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