A lo largo de los años, tiendas de ropa, juguetes y electrónicos han desaparecido y muchas veces ni nos hemos dado cuenta, algunas debido a la bancarrota y otras simplemente es un misterio.
Por eso mismo, aquí te contaremos cuáles son algunas de las tiendas que quebraron y fueron compradas por otro empresario y también las que nunca volvieron a dejar un sólo rastro de existencia.
Mervyns: Fue una cadena de tiendas departamentales con sede en Hayward, California, ofrecía productos como zapatos, ropa, artículos de hogar y joyería. Era parte de una de las 100 tiendas más grandes de Estados Unidos, sin embargo en julio de 2008 se declaró en bancarrota y en octubre de ese año comenzó la liquidación de artículos. Oficialmente en diciembre de ese mismo año desapareció.
Toys «R» Us: En septiembre de 2017, Toys “R” Us solicitó por bancarrota de Capítulo 11 en los Estados Unidos para hacer frente a su deuda de $5 mil millones y pedir prestado $2 mil millones para pagar a sus distribuidores de juguetes. Para diciembre de ese año la empresa anunció el cierre de 26 tiendas en el Reino Unido, así como 180 tiendas en los Estados Unidos. Sin embargo, Macys decidió colaborar con Toys “R” Us para evitar que desapareciera por completo e inauguró pequeñas secciones en sus tiendas. En California hay más de 70 de estas secciones.
Payless ShoeSource: Esta empresa comenzó a desaparecer poco a poco, sin embargo en 2012 se anunció que la empresa sería comprada por Wolverine World Wide, Blum Capital y Golden Gate Capital por $1,320 millones de dólares, pese a esto en 2017 se declaró en quiebra y cerró sus 2,100 tiendas en Estados Unidos.
KMart: A principios de 2002, KMart se declaró en quiebra bajo el liderazgo del director ejecutivo de ese entonces, Chuck Conaway, quien tuvo éxito al construir CVS Corporation. Sin embargo, lograron salir de la quiebra y despidieron a los directores y ejecutivos de ese momento, lo que los llevó a cerrar más de 300 tiendas y despedir 34 mil trabajadores.
Sizzler: Este restaurante se declaró en bancarrota luego de 60 años operando, no fue necesariamente por deudas sino que comenzaron a disminuir ventas durante la pandemia de COVID-19 en septiembre del 2020. Pese a esto la cadena sigue haciendo su lucha por mantenerse aunque sus restaurantes se han visto en la necesidad de ir cerrando.
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Estos son sólo algunos ejemplos de tiendas que anunciaron su bancarrota y aunque no todas han desaparecido, lo cierto es que recuperarse les ha costado mucho.
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