La reciente quiebra del banco SVB Financial Group, ha generado preocupaciones sobre una posible crisis crediticia en Estados Unidos, sin embargo, expertos aseguran que los problemas en el mercado de préstamos no comenzaron con la caída de SVB y posiblemente no terminen allí. Informa Reuters
El mercado de préstamos de los Estados Unidos ha estado en dificultades desde hace varios años. Según los expertos, los prestamistas se han vuelto más cautelosos después de la crisis financiera de 2008 y han restringido el crédito a las empresas más pequeñas y menos establecidas.
Las empresas emergentes, en particular, han tenido dificultades para conseguir financiamiento y han tenido que buscar capital en otros lugares, como la inversión de capital de riesgo y los préstamos alternativos.
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La pandemia de COVID-19 ha exacerbado aún más los problemas de crédito en Estados Unidos, ya que muchas empresas han cerrado o experimentado una disminución en sus ingresos, lo que ha aumentado el riesgo de impago y ha llevado a los prestamistas a restringir aún más el crédito.
A pesar de las medidas de estímulo económico, muchas empresas han luchado por sobrevivir, lo que ha aumentado la tasa de morosidad en los préstamos
La quiebra de SVB Financial Group ha sido una llamada de atención para los inversores, ya que la compañía se centró en prestar a empresas emergentes y tecnológicas. Sin embargo, algunos expertos creen que la quiebra de SVB es un síntoma de problemas más profundos en el mercado de préstamos de los Estados Unidos.
La consolidación de los bancos ha llevado a una menor competencia en el mercado de préstamos, lo que ha llevado a mayores tasas de interés y ha hecho que sea más difícil para las empresas obtener préstamos. Además, la regulación ha aumentado desde la crisis financiera de 2008, lo que ha llevado a los bancos a ser más cautelosos a la hora de prestar dinero.
En resumen, aunque la quiebra de SVB Financial Group ha generado preocupaciones sobre una posible crisis crediticia en Estados Unidos, los expertos creen que los problemas en el mercado de préstamos son más profundos y pueden requerir cambios significativos en la regulación y la competencia para ser resueltos.
