Los directivos de TI que cuentan con herramientas y soluciones diseñadas con el fin de optimizar los presupuestos y garantizar el que aporten valor a la organización, han de impulsar la colaboración de las áreas de TI con departamentos como los de compras y financiero.
Nunca ha habido un mejor momento para ser CIO. El Chief Information Officer o Director de Sistemas de Información cuenta hoy con la mayor relevancia e influencia en empresas y organizaciones, como impulsor de una transformación digital, aceptada como ineludible y, por primera vez, con pleno respaldo de CEO, consejos de administración y altos directivos.
Los CIO se encuentran con todo el protagonismo, pero también ante la compleja y esencial disyuntiva de equilibrar gastos en infraestructuras instaladas y en aportar inversiones imprescindibles para esa transformación digital. Unas inversiones destinadas a modernizar procesos e infraestructuras con una digitalización que no puede escalonarse, mientras que nuevas exigencias económico-financieras y de transparencia obligan a un control exhaustivo de los gastos operativos.
De esta manera, la agenda del CIO en 2021 prioriza todo tipo de iniciativas que, bajo el concepto genérico de transformación digital, se encuentran grandes desafíos en materia de redireccionamiento de recursos hacia las nuevas prioridades del negocio, remodelación de operaciones para incrementar la eficiencia y las capacidades de adaptación de la cadena de suministro, apostar por los nuevos productos y servicios que demandan los clientes y reenfocar el liderazgo en TI como eje del impulso digital del negocio.
En este whitepaper elaborado por Pagero se habla de todas estas cuestiones y presentando soluciones que giran en torno a la automatización y optimización de procesos y a la generación de valor para el negocio.
