La transformación digital, antes considerada una estrategia empresarial innovadora, ha evolucionado para convertirse en un objetivo fundamental para la supervivencia de las empresas.
La mayoría de los CEO (72%) continúan priorizando las inversiones digitales, según el informe de Perspectivas para Directores Ejecutivos 2022 de KPMG, debido a las preocupaciones sobre la tecnología disruptiva, uno de los tres principales riesgos para el crecimiento organizacional. La falta de evolución a través de la transformación digital podría llevar a ser superados por competidores más eficientes y startups más comprometidas con los clientes.
La transformación digital implica integrar tecnologías digitales en todos los aspectos de las operaciones comerciales, para ofrecer nuevos productos y servicios, mejorar los existentes y agilizar procesos. Es constante y redefine cómo las organizaciones usan tecnología, personas y procesos para crear nuevos modelos de negocio y fuentes de ingresos, impulsados por cambios en las expectativas de los clientes.
Los CEOs, en colaboración con líderes de tecnología y recursos humanos, deben dirigir esta transformación, combinando filosofías empresariales con modelos de desarrollo rápido de aplicaciones. La transformación digital se ha vuelto crucial debido a la llegada de Internet comercial y tecnologías móviles, lo que ha llevado a una digitalización continua.
Vea también: ¿Cómo escoger talento para la transformación digital de su empresa?
Empresas como Sysco, Domino’s Pizza y John Deere han tenido éxito al transformar sus procesos y modelos de negocio con tecnologías digitales. La nube es fundamental para la transformación digital, permitiendo agilidad y acceso en cualquier momento y lugar. Las tecnologías de análisis, inteligencia artificial, IoT y automatización también desempeñan un papel crucial.
La alineación de objetivos con metas comerciales, colaboración, elección de socios estratégicos, enfoque en resultados del cliente y capacitación del personal son pasos esenciales para una transformación exitosa. Los desafíos incluyen problemas de seguridad, falta de habilidades tecnológicas, insuficiencia de recursos para la gestión del cambio y la deuda técnica. La transformación digital debe estar en sintonía con las tendencias del mercado y del cliente para mantener la relevancia. Las empresas deben entrelazar estrategias digitales con objetivos comerciales y adaptarse ágilmente a los cambios tecnológicos, guiando a las personas y procesos en el proceso.