Eduardo Lopardo, director general de la empresa en Argentina, habló acerca de la empleabilidad del negocio.
Arcos Dorados es el mayor franquiciado independiente de McDonald’s en el mundo, con un área operativa que alcanza a toda Latinoamérica. En Argentina, la compañía opera 224 restaurantes que funcionan bajo la dirección de Eduardo Lopardo.
Desde hace tiempo, uno de los objetivos de este ejecutivo que tuvo un paso por la industria alimentaria pone el foco en potenciar el empleo joven, en un contexto en el que la incorporación de tecnología también impacta fuerte. Ese juego está cruzado por las relaciones laborales e incidido también por el contexto inflacionario de la economía del país.
“Tenemos mucha experiencia y muchos años, y mucha escala en esto de generar empleo joven, sobre todo para quienes hacen su primera experiencia laboral”, comentó. “Tenemos 37 años de experiencia empleando jóvenes. Es algo que sucedió desde el primer día, en el año 1986″, insiste en el diálogo en el que repasa que sobre 18 mil empleados en el país, 16 mil tienen entre 16 y 24 años. “Sólo el año pasado hemos hecho más de cinco mil contrataciones”, agregó.
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«Cuando vos a un chico le das una oportunidad de insertarse, de prepararlo, de capacitarlo, eso lo ordena socialmente, en términos de construcción de hábitos, disciplina, de tener que viajar y cumplir un horario. Es como adquirir habilidades sociales, adquirir habilidades emocionales, más allá de las habilidades técnicas, en un restaurante el ítem seguridad alimentaria es dramático y se aprende en un entorno profesional, como es el de McDonald’s. Trabajar en equipo, cumplir con normas, cumplir con procedimientos», expresó en relación a los mitos sobre la empleabilidad de los jóvenes.
Por otro lado, el director general explicó cómo se desenvolvieron durante la pandemia. «En números redondos, cerca de 300 personas fueron a empresas tecnológicas, y el 70% volvió. Otros se quedaron en Mercado libre, es decir, un trabajo de mayor especialización y de buenas oportunidades. Pero creo que tiene que ver con el modelo. El número uno de la compañía, que maneja los 2.300 restaurantes, empezó trabajando en una parrilla. Entonces, el modelo de crecer dentro de la compañía es flexibilidad horaria, tiempo parcial, para que los chicos puedan estudiar. Que los chicos de 16 años terminen el secundario y vayan a la universidad».
En relación al trabajo formal para sectores vulnerables, Lopardo contó que hace un par de años hicieron un programa que se llamó «Jóvenes con Futuro». «Necesitábamos más de 100 chicos para trabajar en el área técnica, mantenimiento de equipos y conservación edilicia. El Ministerio de Trabajo nos ayudó a ir a buscar a 100 chicos de entornos vulnerables que hubieran abandonado el secundario técnico. El sindicato nos ayudó a capacitarlos seis meses con más de 80 horas mensuales.»
