Los estantes de los supermercados de todo Estados Unidos están vacíos, y así seguirán, a medida que las tiendas se esfuerzan por reponer rápidamente los productos de primera necesidad como leche, pan, carne, sopas enlatadas y productos de limpieza.
Los compradores descontentos dieron rienda suelta a su frustración en las redes sociales durante los últimos días, publicando fotos en Twitter de estantes vacíos en las tiendas de Trader Joe’s, Giant Foods y Publix, entre muchos otros.
Después de lidiar con dos años de pandemia y problemas relacionados con la cadena de suministro, los supermercados todavía no recibieron el respiro que esperaban. Más bien, ahora se enfrentan a una serie de otros contratiempos.
El golpe devastador de ómicron
Mientras la variante altamente contagiosa ómicron del coronavirus sigue enfermando a los trabajadores, está creando escasez de personal para funciones críticas como el transporte y la logística, lo que a su vez está afectando a la entrega de productos y al reabastecimiento de las estanterías de las tiendas en todo el país.
El CEO de Albertsons, Vivek Sankaran, reconoció que el suministro de productos es escaso durante la llamada de resultados de la empresa con los analistas el martes.
«Creo que, como empresa, todos hemos aprendido a gestionarlo. Todos hemos aprendido a asegurarnos de que las tiendas sigan siendo muy presentables, y a dar a los consumidores tantas opciones como podamos», dijo Sankaran durante la llamada.
Aun así, añadió, ómicron ha hecho «un poco de mella» en los esfuerzos por mejorar las deficiencias de la cadena de suministro. «Esperamos que haya más problemas de suministro en las próximas cuatro a seis semanas», dijo Sankaran.
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