Según publica AmericaRetail & Malls, en la era de la publicidad y las redes sociales, los zapatos han adquirido un significado más allá de su función básica de protección o comodidad.
Más bien, se han convertido en un medio de expresión personal y social, donde el tipo de calzado que una persona elige llevar puede transmitir una variedad de mensajes y significados.
Juan Martín Murillo Herrera explora cómo la vestimenta, y en particular el calzado, va más allá de su propósito práctico para convertirse en un símbolo de estatus y pertenencia social en Colombia.
Marcas de renombre mundial, como Nike con su asociación con atletas de élite, han contribuido a esta percepción, vinculando el calzado con valores de prestigio y éxito.
Wilmer Ladino, consultor de Imagen especializado en Moda Femenina, destaca el papel de las marcas en la creación de una identidad aspiracional, donde los consumidores eligen productos no solo por su función, sino por la sensación de superioridad y pertenencia que ofrecen. Este fenómeno se ve especialmente pronunciado entre los jóvenes, el principal público objetivo de las marcas, donde el calzado deportivo y de alta gama se ha convertido en un símbolo de estatus.
El código de vestimenta en diferentes contextos sociales, desde fiestas hasta lugares de trabajo, también refleja esta asociación entre el tipo de calzado y el estatus social. Un estudio de la revista GQ señala el fenómeno del «nuevo clasismo», donde el tipo de calzado usado puede ser interpretado como un indicador de estatus social.
Sin embargo, este énfasis en el estatus a través del calzado no está exento de críticas. La creciente disparidad en los precios del calzado, exacerbada por aranceles e impuestos, plantea preguntas sobre la equidad y la distribución de la riqueza en la sociedad.
En resumen, el calzado se ha convertido en un símbolo poderoso de estatus social en Colombia, donde la elección del tipo de zapatos puede comunicar mucho más que solo preferencias personales.
A medida que la influencia de la moda y la publicidad continúa creciendo, es probable que esta asociación entre el calzado y el estatus social siga evolucionando, dejando una marca indeleble en la sociedad colombiana.
