Según publica el portal cincodias.elpais.com
El racismo de Kayne West le cuesta a Adidas 700 millones en pérdidas. La marca alemana admite que la ruptura de su contrato con el rapero lastrará sus resultados anuales hasta casi los dos dígitos
El racismo de Kayne West le va a costar muy caro a Adidas; hasta 700 millones de euros, O, mejor dicho, la reacción de la compañía alemana ante lo que fue una provocación en toda regla. Así lo ha admitido la empresa, que también señala que todavía continúa lidiando con las consecuencias de la disputa con el rapero y exsocio Ye.
La marca alemana de vestimenta deportiva especificó que en caso de tener que cancelar todo el inventario existente de Yeezy, la línea de productos que lanzó vinculados al rapero, podría reportar tal pérdida en este mismo ejercicio de 2023. Ya ha señalado anteriormente que sus ganancias e ingresos de 2022 se habían visto afectados al terminar con ese lucrativo acuerdo.
De hecho, se calculó que el negocio conjunto de Adidas y West rondaba los 1.500 millones de euros y que, al producirse la ruptura en el último trimestre, que es cuando más ventas de productos relacionados con Ye generaba, el impacto sería mayor de lo esperado. No en vano, en octubre cifraba las pérdidas en unos 200 millones, menos de un tercio de lo que admite ahora.
El historial polémico de West viene de lejos pero lo que termonó hartando a Adidas fue su intercención en el podcast Drink Champs, donde aseguró que George Floyd, el afroamericano asesinado por un policía en Mineápolis (Estados Unidos) en 2020, falleció por consumo de droga y no por la asfixia que le provocó el policía Derek Chauvin, tal y como confirmó la autopsia y la sentencia judicial que condenó al agente.
El nuevo director ejecutivo, Björn Gulden, tiene ahora la tarea de restablecer una marca acosada por crisis en distintos frentes, según informa Bloomberg. No en vano, las ventas se hundirán a una tasa cercana a los dos dígitos este ejercicio, según el pronósticoque la empresa alemana fijó este jueves.
Todo esto contrasta con el crecimiento de aproximadamente el 4% que estimaban los analistas para Adidas.
Gulden aterrizó en Adidas en enero después de casi una década liderando a su competencia Puma. Ahora tiene la tarea de revitalizar la línea de de zapatillas y ropa de Adidas y recuperar clientes de EE.UU., Europa y China.
