El auge del calzado argentino: una estrategia para competir con Nike y Adidas
El mercado del calzado deportivo en Argentina está experimentando una transformación notable, con marcas locales incursionando en el negocio de los botines de fútbol para competir con gigantes internacionales como Nike y Adidas. Estas marcas argentinas están aprovechando la demanda de opciones más accesibles y la búsqueda de productos de fabricación nacional para ganar terreno en un sector dominado durante mucho tiempo por empresas extranjeras. Con propuestas de bajo costo, insumos locales y proyecciones ambiciosas de exportación, están logrando un crecimiento significativo en un mercado altamente competitivo.
Uno de los protagonistas de este cambio es Martín Amoros, fundador de Raptor, una marca que emergió durante la pandemia y rápidamente ganó tracción en el mercado. Amoros, con una década de experiencia en la industria del calzado, identificó una oportunidad en la creciente demanda de botines de fútbol y decidió lanzarse por su cuenta. Con una producción mensual de más de 20.000 pares en una fábrica de 1600m2 en Valentín Alsina, Raptor se ha convertido en un competidor destacado en el segmento de calzado deportivo en Argentina.
El éxito de marcas como Raptor refleja una tendencia más amplia en la industria del calzado deportivo argentino. Mientras Nike y Adidas se centran en productos de alto valor con precios que superan los $ 100.000, las marcas locales están llenando el vacío con opciones más económicas y accesibles. Estas marcas ofrecen una producción 100% nacional y precios entre un 50 y 80 por ciento más bajos que los de los gigantes internacionales. En 2023, cuatro de estas marcas lograron un volumen anual de 430.000 pares, y se proyecta que esta cifra crecerá más de un 30 por ciento este año.
Si bien el mercado local sigue siendo el foco principal, estas marcas también están mirando hacia el mercado internacional. La industria del calzado deportivo en Argentina movió cerca de 33 millones de pares en el mercado local en 2023, con los botines de fútbol representando un 7 por ciento de ese total. A medida que estas marcas locales consolidan su posición en el mercado interno, también están explorando oportunidades de exportación para expandir su presencia global.
Sin embargo, el camino hacia el éxito no ha estado exento de desafíos. Las dificultades para importar insumos han afectado a algunas fábricas ensambladoras, lo que ha llevado a una escasez de botines en el mercado local. Además, los cierres temporales de fábricas en Asia debido a la pandemia han exacerbado la situación. A pesar de estos obstáculos, las marcas argentinas están demostrando su capacidad para adaptarse y prosperar en un entorno cambiante.
En este contexto, la reciente apertura del gobierno argentino y los cambios en las reglas de importación ofrecen nuevas oportunidades para las marcas locales. Con una mayor apertura en el mercado, se espera que estas marcas puedan mantener su atractivo mediante la oferta de precios competitivos y productos de alta calidad. Sin embargo, la competencia sigue siendo feroz, y las marcas locales tendrán que seguir innovando y diferenciándose para mantener su posición en un mercado cada vez más competitivo.
El auge del calzado argentino en el mercado de los botines de fútbol es un reflejo de la creciente demanda de productos locales y económicos. Con una combinación de calidad, accesibilidad y visión de futuro, estas marcas están desafiando el dominio de los gigantes internacionales y abriendo nuevas oportunidades en el mercado global del calzado deportivo.
