Contundente y con las ideas muy claras, Laura González-Molero, presidente de la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), analiza en esta entrevista con Proa Comunicación la crisis económica que las medidas de confinamiento que se han establecido por el coronavirus van a desatar en España. Admite que si en marzo la prioridad era “afrontar una pandemia en la que nos vimos desbordados desde el punto de vista sanitario”, en estos momentos, cuando ya nos encontramos en una segunda fase, “tenemos el reto de buscar soluciones para no parar el país, para que la actividad de nuestras empresas continúe, porque si no el impacto va a ser enorme”.
El FMI proyecta para España una recesión económica del 8% (un 3,6% para el mundo), Banco de España hasta un 13%, y ante esta nefasta previsión solo hay un camino, a su juicio: “trabajar en lo que estamos llamando la nueva normalidad”. Una vez que ya “sabemos y tenemos en marcha procesos para proteger la salud de nuestros empleados, tenemos que trabajar en conseguir que nuestro modelo de negocio, con las modificaciones y ajustes necesarios por la situación en la que nos encontramos, siga estando activo”. Y la clave para ello es “entender muy bien a nuestros clientes, estar muy cerca de ellos y que nos sientan más presentes que nunca”, ya que, de lo contrario, el mayor riesgo sería, en su opinión, que hubiera una triple crisis: una de demanda, otra de oferta y la última financiera, lo que llevaría a una grave situación de desempleo.
Para González-Molero, lo fundamental ahora es “sacar lo mejor de nosotros mismos, entender cómo podemos ayudar a nuestros clientes, qué nuevos mecanismos y herramientas tenemos que utilizar”. Considera que si en algo han avanzado todas las empresas en esta crisis es en digitalización. Un avance que, asegura, “no lo habíamos conseguido en el último año”. Todo ello se ha materializado en dotar de “instrumentos y material a nuestros empleados para que puedan teletrabajar y en automatizar procesos para conseguir que no se pare, porque la prioridad es mantener la actividad y hacerlo, además, con soluciones creativas”.
Cree que es absolutamente imprescindible que no se frene el consumo. “Necesitamos una demanda (de productos) fuerte que nos permita dar estímulos a las empresas, especialmente a las pymes, que es el sector que más va a sufrir, y tenemos que hacer un esfuerzo grande para a corto y medio plazo (y no me gustan los nacionalismos ni acotar los mercados, añade) apoyar a nuestras empresas y comprar a nuestros productores, agricultores y ganaderos para ayudar a la economía local” en estos momentos de excepcional dificultad. Es la única manera que, asegura, permitirá “mantener parte de los puestos de trabajo y la generación de oferta, porque esto hará que la economía se ralentice pero a una velocidad menor”. “No vamos a poder evitar que haya una recesión económica, pero sí que podemos con nuestro comportamiento individual hacer que no se pare la economía”, añade.
Laura González-Molero no olvida subrayar cómo la sociedad española está demostrando su calidad humana y su generosidad. “Millones de personas y empresarios están haciendo grandes esfuerzos, poniendo a disposición de los colectivos más vulnerables soluciones y, al mismo tiempo, generando trabajo para que sus empleados no estén parados, aunque no sea rentable económicamente o no se refleje positivamente en la cuenta de resultados”.
Preguntada por si la digitalización iniciada por algunas empresas se abandonará cuando lleguemos a un momento de cierta normalidad, la presidente de la APD es tajante: “todo lo que las empresas han evolucionado en digitalización no tiene vuelta atrás” y será de esta manera porque, a su juicio, “nos hemos sorprendido de cómo podemos ser mucho más eficaces y eficientes al no perder tiempo en desplazamientos o en reuniones”. “Creo que los beneficios y los aprendizajes positivos de esta crisis van a permanecer en el tiempo, pues empresarios, trabajadores y sociedad hemos aprendido que lo presencial por presencial no tiene ningún sentido”, afirma.
Gracias a esta crisis, “nos hemos hecho más eficientes y hemos mejorado nuestra capacidad de uso de las tecnologías… Hemos hecho un training acelerado de tecnologías para ser más eficaces en nuestro trabajo”. Y esto evidentemente no está reñido con el contacto personal, pero sí es cierto que la normalidad que vendrá no va a ser “igual al pasado”, porque “la vida, el ecosistema evoluciona”. En este sentido, destaca que “en la nueva normalidad que va a haber creo que la digitalización va a seguir siendo un pilar muy importante”.
Asimismo, señala que “vamos a tener que trabajar de manera distinta para conseguir que en esa nueva normalidad tengamos una sociedad más justa, más colaboradora, más generosa, en la que la colaboración público-privada, la colaboración entre empleados y empresas, la colaboración entre empresas y entre instituciones y organismos de cualquier titularidad sea una realidad”. Según la presidente de la APD, no hay que olvidar que “está en juego el modelo de sociedad que quiere España, Europa y el mundo para el siglo XXI”.
Sobre el liderazgo que se requiere en esta época de crisis e incertidumbre, González-Molero entiende que se debe basar en la transparencia, el trabajo en equipo, la colaboración y el esfuerzo, un valor éste último que se había perdido y que se ha recuperado en esta situación que vivimos. “Vamos a tener que dar ejemplos de generosidad y, de hecho, ya ha habido muchos directivos que han reducido su salario o han renunciado a sus bonos”, resalta.
La presidente de la APD estima que es esencial un pacto de empresarios con el Gobierno, agregando que es clave para la reconstrucción de la nueva normalidad “la confianza, la credibilidad y la honestidad”. Solo con estos ingredientes, que son a los que han recurrido países como Corea del Sur, Portugal o la propia Alemania, “conseguiremos que haya colaboración de todos, de todo el espectro político, de la empresa y del mundo privado”.
Biografía de Laura González-Molero
Presidente de APD y Consejero Independiente de Bankia S.A., Viscofan S.A., Acerinox S.A. y Ezentis S.A., lo fue de Calidad Pascual SL hasta julio 2016, lo que le ha permitido conocer en profundidad diversos sectores como el de Infraestructuras, Industrial, financiero y gran consumo en empresas cotizadas y no cotizadas con actividad en España e Internacional. Posee gran experiencia en el área de Nombramientos, Retribuciones, Auditoria y Responsabilidad Social Corporativa por ser miembro de dichas Comisiones. Así como es miembro del Consejo Asesor de ISS y hasta diciembre 2019 del Patronato de la Fundación Adecco. Miembro del Club de Consejeras de PwC, de WCD (Woman Corporate Directors) y del ICA.
