La crisis sanitaria que el mundo enfrenta por la acelerada propagación del coronavirus denominado COVID-19, trajo consigo otra “enfermedad” muy contagiosa y altamente dañina para las economías de los países: las compras de pánico entre las poblaciones que provocan desabasto de productos esenciales, y que representan un reto para las cadenas de suministro del sector minorista (retail) y sus proveedores.
En México este consumo desmedido y espontáneo ha presentado facetas distintas en línea con las diversas etapas de la transmisión y las políticas de mitigación del virus por parte de las autoridades.
La plataforma tecnológica Pabis Retail realizó un análisis en cuatro mil puntos de venta dentro del sector retail en el país y encontró que durante marzo de este año las ventas crecieron 45% en comparación con lo registrado un mes antes (62% en el caso de los clubes de precios y 40% en tiendas de autoservicio).
“Lo anterior se explica porque durante el inicio de la pandemia y las compras de pánico, los consumidores buscaron hacerse de productos en grandes presentaciones al menor costo posible como lo ofrece el club de precios. Durante abril, la recompra la están realizando más en autoservicio pues adquieren lo que se va acabando en casa”, explica Leslie Alonso, Gerente de Operaciones de Pabis Retail.
El análisis de esta empresa permite identificar que durante la semana 12 de este año (16 al 22 de marzo) se presentó el mayor pico de demanda para…
