La salud laboral: un compromiso que debe seguir en lo más alto de la cultura del trabajo

Gonzalo Ortega, CEO de Kinin

El Día Internacional de la Salud celebra ese valor como una herramienta vital en la vida personal y comunitaria, un factor clave en nuestro quehacer y esencial en el trabajo que las personas, las comunidades, los gobiernos y las organizaciones de todo el mundo desarrollan para el bienestar común. Cada organización debe orientar sus esfuerzos a la consecución de una cultura que vele por priorizar el bien común en objetivos empresariales, institucionales, sociales y ecológicos.

Este 2022 esta conmemoración apunta a la salud de las personas y también del planeta, por lo que los desafíos son enormes en este ámbito y cada uno puede aportar desde su realidad: optando por más transporte público, prefiriendo alimentos saludables, generando mejores alternativas en la disposición de desperdicios, entre otras alternativas.


Banner_frasco-suscripcion-800x250

De acuerdo a datos de la Superintendencia de Seguridad Social (2019), Chile alcanzó ese año la meta autoimpuesta en 2015 en la Política Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (PNSST) de un 3% de tasa de accidentabilidad en el mundo del trabajo. Mientras se redujeron en 5% los accidentes fatales del trabajo, respecto al año anterior, 59.155 trabajadores sufrieron un accidente de trayecto, lo que representó un alza de 10% respecto de 2018.

En lo que concierne a las empresas en Chile, en general tienden a cumplir con normativas que son fiscalizables, como por ejemplo la entrega de elementos de protección personal, implementación de horarios de colación o sistemas de turnos, entre otros aspectos. Sin embargo el “cómo” se desempeña el trabajador en su puesto de trabajo y si éste utiliza la “técnica correcta” para realizar las distintas tareas que tienen relación con su cargo no son consideradas, muchas veces, como de primera importancia por parte de los empleadores.

Muchas veces, ejecutar posturas forzadas, movimientos repetitivos o manipular de manera excesiva cargas manuales genera un deterioro en la calidad de vida. Lamentablemente, en varias oportunidades las empresas actúan una vez que ya ocurren las lesiones o accidentes, dejando de lado el trabajo preventivo.

Esa mentalidad ha ido cambiando de manera lenta, pero en la dirección correcta. Hoy las empresas visualizan al trabajador como un pilar fundamental en el proceso productivo, por lo que le otorgan más valor a mejorar las condiciones de sus labores productivas, así como a participar de manera más justa en la retribución de sus actividades, a través de la adhesión a plataformas como Desafío 10X.

Si hace más de 50 años Chile dio un gran paso en seguridad y salud para los trabajadores con la Ley de Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales -en una época donde se accidentaban más de 35 de cada 100 trabajadores- en la actualidad lo importante es seguir reforzando la cultura de la prevención. Tanto empleadores como trabajadores son claves en la cultura preventiva, la que se ha ido fortaleciendo en las empresas de distintos sectores productivos. Hoy, más que nunca, el compromiso de empresas, trabajadores y la autoridad es fundamental para abordar esta tarea en conjunto.

Banner_azules
Reciba las últimas noticias de la industria en su casilla:

Suscribirse ✉