Por Mauricio Blanco, Director Ejecutivo de Accenture Chile
Edge Computing tendrá un rol fundamental en la tienda del futuro. Esta tecnología puede permitir un cálculo más avanzado donde residen los datos -en la propia tienda minorista- sin tener que transmitirlos a la nube. Esto es importante porque permite a las empresas obtener más valor de sus datos, más rápidamente. Ahorra costos de transmisión de datos. Y, en combinación con la conectividad 5G, proporciona una latencia mucho menor y transferencias de datos más rápidas. Puede aumentar la resiliencia frente a las interrupciones de la red, y da a los retailers más control sobre dónde se procesan sus datos.
En conjunto, estas capacidades desbloquean las interacciones en tiempo real y la automatización en fracciones de segundo que serán el núcleo de las futuras experiencias de compra en las tiendas. Cuando la infraestructura minorista reside en el borde, la empresa puede captar toda la actividad que está ocurriendo en la tienda en el momento y responder inmediatamente.
Considere el potencial de las nuevas experiencias de venta al por menor, incluidas las recomendaciones y promociones personalizadas en tiempo real. Imagínese la posibilidad de ofrecer a los clientes sugerencias y ofertas personalizadas y adaptadas al contexto a través de pantallas interactivas o teléfonos inteligentes mientras recorren la tienda.
Del mismo modo, la computación de borde permite a un minorista introducir experiencias inmersivas de vanguardia en la tienda. Esto puede ser especialmente potente en segmentos como el de la belleza y la ropa, en los que la posibilidad de realizar «pruebas virtuales» de maquillaje o ropa con realidad aumentada puede transformar realmente la experiencia del cliente.
¿Y qué hay de las interacciones personales con los vendedores? La potencia y la velocidad de edge computing permiten poner en manos de los empleados información sobre los clientes en tiempo real, dándoles nuevas herramientas para potenciar la experiencia de los clientes y explorar las oportunidades de venta.
De hecho, el edge computing puede utilizarse siempre que la velocidad, el volumen y la privacidad de los datos sean importantes. Y hay toda una serie de casos de uso que los minoristas pueden considerar hoy.
Algunos retailers y restaurantes de comida rápida ya están invirtiendo en el mayor tiempo de actividad y fiabilidad que supone transformar sus sistemas de punto de venta (POS) de misión crítica con capacidades de borde. Además, con la IA y la computación de borde la industria del retail tiene el potencial de reducir significativamente la pérdida de inventario y tener un impacto real en el resultado final.
La computación de borde es también un componente clave de las experiencias de caja «walk out». En este caso, los análisis de vídeo se combinan con los datos de los sensores de la tienda en tiempo real para realizar un seguimiento automático de las compras de las personas, lo que significa que pueden tomar lo que necesitan y marcharse, sin tener que esperar en la cola.
Además, los minoristas pueden utilizar sensores y cámaras para crear estanterías inteligentes que puedan controlar las existencias en tiempo real para optimizar la capacidad de las estanterías y reducir el desperdicio (incluyendo el pedido automático de nuevas existencias cuando sea necesario).
Edge también abre la posibilidad de personalizar la orientación de los clientes, reducir los tiempos de espera, analizar la afluencia y la demanda en tiempo real, y mucho más.
Está claro que la tecnología de vanguardia será una de las principales capacidades del comercio minorista en un futuro próximo. Y, en particular, la computación de borde será clave para permitir una experiencia de compra «desmaterializada», un componente central de la Tienda del Mañana. En este caso, los minoristas permitirán a los clientes de la tienda pedir determinados productos -por ejemplo, productos básicos para el hogar- escaneando códigos QR con un smartphone. A continuación, un microcentro de distribución les sirve sus compras en cuestión de minutos.
Este tipo de experiencias desempeñará un papel fundamental a medida que los minoristas busquen fusionar sus capacidades online y offline y así transformar el crecimiento de los ingresos y la eficiencia operativa. Sí, hay retos logísticos y limitaciones legadas que superar en muchas organizaciones. Pero no hay duda de que la computación de borde desempeñará un papel clave en la futura transformación del retail.
