Esta campaña de Glimpse denuncia como empresas petroleras pagan a influencers y creadores de contenido para generar acciones de greenwashing.
Sin lugar a dudas los influencers son una de las figuras más importantes del mundo de las redes sociales. Marcas y productos acuden a los creadores de contenido con el objetivo de influir en la decisión de compra de las audiencias, pero en ocasiones esta influencia puede hacer que los espectadores ignoren las alarmas del greenwashing.
«Las empresas petroleras y de gas pagan a personas influyentes para ocultar la verdad sobre sus sucios negocios», denuncian desde Glimpse, un colectivo creativo que ha decidido tomar la palabra sobre la temática del greenwashing con su parodia «Save the Planet, Unfollow a Greenwasher» («Salva el planeta, deja de seguir a un greenwasher»).
El video que conforma la campaña muestra como una youtuber vende la buena voluntad de Shell, pero vomita petróleo conforme explica las acciones llevadas a cabo por la empresa ‘en pro del planeta’. De esta forma, la acción expone las conclusiones de una reciente investigación de Desmog sobre cómo las grandes petroleras utilizan influencers para desarrollar una «conexión emocional» con los jóvenes.
«Las petroleras le pagan a influencers para hacer que sus negocios sucios parezcan verdes», denuncia la campaña.
LinkedIn censura un vídeo contra el greenwashing
Tras su publicación, el video de la campaña se eliminó de Linkedin por ser «ofensivo». Es por ello que James Turner, fundador de Glimpse, realizó una publicación en LinkedIn donde señaló «el vídeo muestra a una influencer ficticia llamada Sally pasando un buen rato, mientras explica cómo las compañías petroleras están pagando a influencers para que les hagan parecer ecológicos. Así que mientras Shell y BP son libres de maquillar de verde sus empresas contaminantes en LinkedIn, ¿los grupos activistas no son libres para mostrar un poco de humor?»
Además, Turner señaló «olas de calor, inundaciones y días de 55 grados en este verano. Socavando la ciencia climática desde los años setenta. Ganar miles de millones a costa del futuro de nuestros hijos. ¿Qué es más ofensivo?»
Posteriormente Glimpse reeditó el video para cumplir con las políticas de la red social. En esta versión del film se presenta el mismo mensaje, pero el vómito de la influencer es censurado por datos que presentan las acciones reales de la petrolera sobre el planeta.
