El precio elevado de sus iPhone en comparación con modelos de similares prestaciones de otras marcas ha sido una de los principales trabas que le impidieron a Apple crecer como antes en volumen de venta.
Es por eso que no sorprende que cada vez sea más fuerte el rumor del lanzamiento de un sucesor del exitoso iPhone SE, el teléfono más barato que haya lanzado la compañía de Cupertino.
Según Nikkei, la próxima generación de iPhones low cost verá la luz en los primeros meses del año que viene.
El nuevo modelo sería el primer teléfono inteligente de bajo costo de Apple desde el lanzamiento, en 2016, del popular iPhone SE, que tenía un precio de venta inicial de US$ 399. “Aunque el nombre y el valor del nuevo modelo no se han decidido, se ve como la última generación del iPhone SE”, publicó MacRumors citando a Nikkei.
Aparentemente, el tamaño del nuevo modelo será similar al iPhone 8 de 4,7 pulgadas que se presentó en 2017. El modelo compartirá la mayoría de los mismos componentes con los iPhones insignia de 2019, y contará con una pantalla de cristal líquido de menor costo, esto le permitirá a Apple lograr un precio inicial más bajo.
Los rumores de un nuevo iPhone de bajo precio aparecieron por primera vez en abril pasado a través de Economic Daily News. En ese momento, se dijo que contaría con un procesador A13, una cámara trasera de lente única y 128 GB de almacenamiento base.
No está claro si heredará el diseño del SE ni si tendrá las características de Face ID de los teléfonos inteligentes más emblemáticos de Apple, pero las referencias de Nikkei sugieren que podría mantener la pantalla bordeada y el botón de inicio con Touch ID.
Variedades
Los dispositivos iPhone XS, XS Max y XR dominan el volumen de venta de la marca, pero la compañía continúa ofreciendo el iPhone 8 y el iPhone 8 Plus (a partir de US$ 599) como opciones de menor costo, junto con la serie de iPhone 7 (a partir de US$ 449).
La idea sería que Apple deje de vender el iPhone 7 cuando lance sus nuevos modelos el 10 de septiembre, lo que dejaría un espacio en su línea para un nuevo dispositivo que podría aumentar su participación en el mercado de teléfonos inteligentes de gama media.
La decisión de Apple de revivir el modelo de menor costo se produce cuando no están yendo bien las cosas para su nave insignia, el iPhone.
Apple informó su primer descenso en los envíos del teléfono el año pasado, y en el primer trimestre de 2019 perdió el segundo lugar como mayor fabricante de smartphones del mundo. Lo superó Huawei. El primero sigue siendo Samsung.
Todo en el marco de una merma de la industria global de teléfonos inteligentes en general, que enfrenta su tercer descenso anual consecutivo en 2019, según las proyecciones de IDC.
La culpa de la caída en la venta de los iPhone radica, en parte, en la intensificación de la guerra comercial entre Washington y Pekín, que ha afectado la comercialización en China, el tercer mercado más grande de la compañía.
Pero la estrategia de precios de Apple también es responsable: el iPhone XS Max se lanzó a US$ 1.099. El mismo Tim Cook, director ejecutivo de Apple, reconoció en enero que “el precio es un factor” detrás de los problemas en las ventas en los mercados emergentes.
Para revitalizar las ventas, Apple redujo los precios de sus iPhones emblemáticos y lanzó programas de intercambio, decisiones que representaron casi la mitad de sus ingresos en la primera mitad del año. Sin embargo, a pesar de estos incentivos, aún así perdió su posición como el segundo mayor fabricante.
El nuevo iPhone, más barato, podría aumentar las ventas cuando decaiga la salida de los nuevos modelos que presentará este mes.
El iPhone SE original vendió alrededor de 30 millones de unidades en 2016 y otras 10 millones entre 2017 y 2018, según Yuanta Investment Consulting.
