Ecuador ha lanzado un ambicioso proyecto de ley de eficiencia económica y generación de empleo con el objetivo de atraer a nómadas digitales. Desde marzo de 2022, el país emite visas de residencia temporal denominadas «Rentista de Trabajador Remoto». El proyecto incluye la propuesta de establecer una residencia fiscal temporal para atraer a los aproximadamente cien millones de nómadas digitales en el mundo, cifra que se espera alcance mil millones para el año 2050, según la ministra ecuatoriana de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, Sonsoles García. La medida busca convertir a Ecuador en un destino atractivo para nómadas digitales, quienes podrían invertir, realizar compras y contribuir al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).
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El proyecto, que debe ser analizado con urgencia este mes en la Asamblea Nacional, forma parte de los esfuerzos del presidente Daniel Noboa por revitalizar la economía del país. La situación económica se ha descrito como «grave», con un déficit fiscal proyectado que supera los 5.000 millones de dólares para el cierre de 2023. El ministro de Economía, Juan Carlos Vega, advierte sobre la herencia de una deuda estatal de 63.000 millones de dólares, equivalentes al 54,7 % del Producto Interno Bruto. La prima de riesgo cercana a los 2.000 puntos básicos complica el acceso a los mercados de deuda, mientras que la economía enfrenta desafíos adicionales como el fenómeno de El Niño, la crisis energética y la reversión de la reforma tributaria.
La propuesta busca atraer inversiones y generar empleo formal, contrarrestando la tendencia de la última década caracterizada por escasos crecimientos reales y una economía que no logra generar empleo adecuado. Además, se espera que la residencia fiscal temporal incentive a nómadas digitales, migrantes retornados e inversionistas a contribuir al desarrollo económico del país sin perder su residencia en otros lugares.
Con información de Expreso
