La cadena de supermercados Tía ha dado un paso significativo hacia la sostenibilidad y la reducción de su huella ambiental con la inauguración de su planta fotovoltaica en el Centro Regional de Distribución (CRD) ubicado en Calacalí – Quito. Con una inversión de un millón de dólares, esta infraestructura marca un hito en la industria al implementar un sistema de generación distribuida fotovoltaico de 1 MW conectado a la red de media tensión, en colaboración con la distribuidora Empresa Eléctrica Quito (EEQ).
La planta fotovoltaica cuenta con un conjunto de 1.972 paneles solares estratégicamente instalados sobre la cubierta logística del CRD, en un área amplia de 5.000 m². A través de esta innovadora solución, se prevé una generación anual de 1.687 MWh, lo que permitirá reemplazar el consumo de energía eléctrica utilizado en las operaciones logísticas de productos perecederos y no perecederos. Además de los beneficios ecológicos, el proyecto promete un ahorro proyectado de 115.000 dólares anuales.
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El proyecto se llevó a cabo en varias fases a lo largo de tres etapas: ingeniería, construcción y puesta en marcha. La etapa de ingeniería incluyó la fase de diseño final, la importación de equipos y los trámites regulatorios necesarios para garantizar el cumplimiento normativo. La construcción se desarrolló entre septiembre de 2022 y junio de 2023, culminando en la exitosa instalación de la planta fotovoltaica.
El esfuerzo conjunto de Tía, el Grupo de Narváez y sus colaboradores ha generado impactos positivos más allá de la sostenibilidad energética. La operación del Centro Regional de Distribución es vital para llegar a 31 ciudades y atender a 80 sucursales en Ecuador. Además, el proyecto ha contribuido a la creación de más de 20 empleos indirectos, fortaleciendo la economía local.
Con esta planta fotovoltaica, Tía ha demostrado su compromiso con la innovación y la responsabilidad ambiental al liderar el camino en la adopción de soluciones energéticas más limpias y eficientes en el sector. La capacidad de reducir aproximadamente 804 toneladas de CO2 anualmente, equivalente a más de 1.600 barriles de petróleo, no solo disminuirá su impacto ambiental, sino que también inspirará a otros actores de la industria a seguir su ejemplo en la lucha contra el cambio climático y la preservación del entorno. Este proyecto, respaldado por la consultoría del BID Invest y ejecutado por Grupo Marriott, es una demostración concreta de cómo la colaboración entre empresas y entidades puede generar resultados transformadores para el bienestar del planeta y las generaciones futuras.
