Economía colombiana 2023, desafíos al cierre del año y perspectivas futuras, la economía colombiana enfrenta turbulencias significativas al finalizar el año 2023, marcando un quiebre en la celebración de los sectores de centros comerciales y retail en el país.
Un análisis detallado de los aspectos económicos revela una amenaza inminente de recesión, con dos trimestres consecutivos en declive, impactando negativamente el consumo y las ventas en la temporada navideña.
El Producto Interno Bruto (PIB) cerró el tercer trimestre del año con una disminución del -0,3%, siendo la primera vez en este siglo que experimenta un decrecimiento, excluyendo la recesión inducida por la pandemia. Además, el sector comercial sufrió una caída del 3,5%.
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Otro indicador relevante es el de las ventas minoristas, que hasta octubre muestra un decrecimiento acumulado del 7,1%. Este declive se ve influenciado principalmente por la disminución en las ventas de automóviles (-21,1%), Informática y comunicaciones (-12,5%), y Ferretería (-13,6%). Asimismo, las líneas de prendas de vestir y calzado experimentan descensos del 6,3% y 5,1%, respectivamente.
El gasto de los hogares colombianos alcanzó los $1.010 billones hasta octubre, registrando una caída del 2,4%, con una disminución per cápita del 4,4%, según datos de Raddar.
El frenazo del consumo se señala como un factor crucial en la caída del PIB, con la inversión (construcción e infraestructura) y el consumo de hogares y gobierno desempeñando papeles destacados. En el corto plazo, el crecimiento económico depende de la demanda agregada de bienes y servicios, siendo el consumo su componente principal.
Los hogares colombianos han dejado de consumir por varias razones. En primer lugar, el «efecto rebote» después de las restricciones de la pandemia llevó a un aumento insostenible del consumo en 2021 (26% anual real), seguido de un inevitable freno en 2022 (3,8%) y una disminución continua hasta el 0,4% en el último trimestre de 2023. La falta de recursos y la inflación, que redujo la capacidad adquisitiva, son factores adicionales que explican la disminución del consumo.
La financiación del desahorro mediante crédito también jugó un papel significativo, pero la desaceleración de la cartera de consumo en los bancos a partir del segundo trimestre de 2022 (-0,33% en octubre de 2023) señala un cambio en la tendencia. Las tasas de interés elevadas y el aumento de la cartera vencida influyeron en la cautela de los bancos al aprobar créditos, afectando directamente el consumo.
La elevación de tasas de interés por parte del Banco de la República, que las llevó de 1,75% a 13,25% en 16 meses, contribuyó a este escenario, siendo un factor adicional que afecta la capacidad de los bancos para financiar el consumo. Las proyecciones para el cierre del año y el próximo periodo son sombrías, con la economía colombiana creciendo entre el 0,9% y el 1%, por debajo de la proyección mundial del 2,9%. La recuperación económica se vislumbra para el 2025, marcando un desafío importante para el país en los próximos años. Según publica Mall & Retail
