La competencia por la llegada de más jugadores y los mayores impuestos, entre otros, llevaron en el último año a que la facturación del sector de restaurantes y comidas creciera solo un dígito.
Sin embargo, las ventas de los líderes del negocio, Crepes & Waffles y El Corral, crecieron por encima del promedio y se alejan de sus inmediatos perseguidores (McDonald’s y Frisby).
Además de ser el crecimiento más bajo de los últimos tres años, del sector han salido las marcas Krispy Kreme (donas) y Paneroli (sándwiches), entre otras.
También entró en liquidación el franquiciado de la estadounidense T. G. I. Friday’s.
Algo similar ocurrió con la licenciataria de Chili’s (comida mexicana), que llegó a abrir varios locales en el país y también cerró. En lo que tiene que ver con Oma, cerró 19 cafeterías y algunos restaurantes.
Por otra parte, se han presentado cierres de restaurantes a manteles como Astrid & Gastón (franquicia), La Cigale y Madam Tusan, en Bogotá, y Queareparaenamorarte en Medellín.
Sin embargo, también hubo buenas noticias; Longaniza, en Cota, Cundinamarca, pasó a manos de los empleados.
No pocos establecimientos tuvieron que reubicarse para reducir espacios, en 2018, ya que el alza del IVA elevó los costos y se vieron obligados a salir de los centros comerciales y abrirlos sobre la calle.
El portal www.losdatos.com indica que los ingresos operacionales de 6.200 empresas del sector de comidas sumaron 10,9 billones de pesos en 2018, con un incremento de 6,8 por ciento, frente los 10,2 billones de pesos totalizados en 2017.
De la primera cifra se desprende que el 73,3 por ciento (8 billones de pesos) correspondió a las 284 cadenas más grandes, que tienen 5.555 locales y cuyas ventas subieron 6,5 por ciento el año pasado.
Por segmentos, el de mayor participación fue catering, con 25,7 por ciento, seguido por las hamburgueserías, con 13,7 por ciento, y los restaurantes a manteles, con el 12,6 por ciento. Entre tanto, la facturación de las 16 cadenas especializadas en pollo subió 3,6 por ciento, al ubicarse en 877.432 millones de pesos.
Además, las ventas de las siete cadenas de café más grandes de Colombia crecieron dos dígitos (23,5 por ciento), a 730.742 millones de pesos, según agrega www.losdatos.com.
La participación de este último segmento en la torta total subió de 7,8 a 9,1 por ciento.
Por su lado, Tostao pasó de tener 312 puntos de venta a 408, y sus ventas sumaron 212.638 millones de pesos, con un aumento de 143,2 por ciento frente al año antepasado.
Pero el rey en la categoría de tiendas de café, a pesar de tener menos locales, siguió siendo Procafecol (Juan Valdez), que pasó de contar con 272 puntos de venta a tener 298; y sus ingresos se elevaron 3,4 por ciento, al llegar a 287.785 millones de pesos el año pasado.
Cifras consolidadas
En cuanto a grupos empresariales, el monarca indiscutible fue Crepes & Waffles, con ingresos operacionales por 529.040 millones de pesos y un aumento del 6,9 por ciento respecto al 2017.
Aunque El Corral registró un crecimiento de 8,9 por ciento en sus ingresos, a 512.637 millones de pesos, continuó siendo el segundo conglomerado del sector.
Les siguieron Arcos Dorados (McDonald’s), con ingresos por 396.314 millones de pesos (un aumento de 6,2 por ciento respecto al 2017), y Frisby, con 361.069 millones de pesos (un crecimiento de 3,4 por ciento).
Aunque las siete primeras posiciones del ranquin de los grupos de cadenas de comidas fueron dominadas por Crepes, El Corral, McDonald’s, Frisby, IGA (marcas Andrés y Kokoriko, entre otras), Mesoamérica (marcas Presto y Oma, entre otras) y Alsea (marcas Archies y Domino’s, entre otras), fue notorio el avance de las jóvenes. Por ejemplo, Takami (Sipote Burrito) creció 18,9 por ciento y Sierra Nevada (hamburguesería) subió 33,5 por ciento sus ventas.
Sin embargo, el 2018 fue malo en rentabilidad para buena parte de grupos del sector de las cadenas de comidas porque pasaron de perder 28.073 millones de pesos a 50.731 millones.
No obstante, Crepes, Frisby y Katz mantuvieron los números en positivo y se ubicaron entre las redes de mayores utilidades netas el año pasado.
Por su lado, El Corral, Arcos Dorados (McDonald’s), IGA y Mesoamérica registraron pérdidas netas en sus balances.
Arcos Dorados Colombia (operadora de McDonald’s) absorbió en mayo a su filial Arcos Dorados Paisas, de Medellín, para simplificar así su negocio en el país.
Reorganización anticipada en Oma
El presidente de Mesoamérica para Latinoamérica, Luis Javier Castro, empresa que tiene 22 % de la firma Restacafé -operadora de las cadenas Oma y Presto-, dijo que seleccionaron las cafeterías más rentables para mantenerlas y cerrar las que no lo eran. “Eso pasa en todo el mundo en el negocio de comidas”, explica.
La división de restaurantes de Restacafé se reducirá a 10 unidades para poner el foco en las cafeterías. Mesoamérica ha invertido US$ 18 millones en los últimos 3 años para impulsar a Oma y Presto. Por su parte, el presidente de Mesofoods, Marlon Masis, dijo que el ambiente económico y empresarial del país es distinto al del 2012, cuando adquirieron Oma y Presto. “Nos anticipamos con medidas para promover su continuidad y competitividad”.
