Brasil enfrenta una desaceleración en la producción de leche, revelan datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE) correspondientes al tercer trimestre del año. La recolección de leche alcanzó los 6,23 mil millones de litros, con una variación del 1,3% en comparación con el mismo período del año anterior. Aunque este ligero aumento se atribuye a la mejora de la rentabilidad para los productores a principios de 2023, los precios en declive desde mayo reflejan una desaceleración en el crecimiento de la recolección, según el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (Ocloa).
La caída de los precios de producción y los desafíos climáticos presentes en el cuarto trimestre indican una producción más ajustada a principios de 2024. Los precios al alza de los insumos alimentarios para las vacas, impulsados por factores climáticos como El Niño, también contribuyen a este escenario negativo. Las condiciones climáticas adversas, como la falta de lluvias en el Nordeste y el exceso de lluvias en la región Sur, principal productora de leche, sugieren una disminución en la producción para el cierre del año.
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Se anticipa que diciembre y enero registrarán un aumento en las importaciones brasileñas de lácteos. Sin embargo, se espera una disminución en 2024 debido al aumento de los precios internacionales y a las medidas destinadas a frenar las importaciones, lo que podría presentar desafíos adicionales para los productores locales.
Con información de Rurales.elpaís
