La situación cambiaria en Bolivia ha capturado la atención, ya que a pesar de la evidente escasez de dólares, la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) asegura que las entidades financieras cuentan con «una provisión regular de dólares» para satisfacer las demandas de la población. No obstante, en un mercado donde coexisten seis tipos de cambio, la disponibilidad de la divisa sigue siendo un desafío crucial para importadores y exportadores nacionales. Desde marzo, el país ha experimentado una notable escasez de dólares, llevando a la aparición de un mercado paralelo con tasas que alcanzan hasta los Bs 7,50 por dólar.
Aunque el secretario ejecutivo de Asoban, Nelson Villalobos, asegura que Bolivia ha superado el periodo de escasez de la moneda extranjera, la realidad en las calles es diferente. La cotización oficial del Banco Central de Bolivia (BCB) ha sido superada por diversas fuentes, como bancos, casas de cambio, y tenedores de criptomonedas, consolidando así seis tipos de cambio desde marzo. A pesar de las afirmaciones de una provisión regular de dólares, los importadores y exportadores continúan enfrentando desafíos para acceder a la divisa, con cotizaciones que difieren significativamente de la tasa oficial del BCB, actualmente de 6,86 bolivianos por dólar.
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En respuesta a la alta demanda de dólares en marzo, el Banco Central de Bolivia intervino directamente en el mercado, vendiendo la divisa. A pesar de estos esfuerzos, la situación persiste, y actores económicos, como empresarios y analistas, expresan sus dificultades para obtener la moneda extranjera a tasas accesibles. El presidente Luis Arce Catacora, en su mensaje por el tercer año de gobierno, reconoció los desafíos enfrentados, incluida la escasez de dólares y los altos costos del petróleo. En este complejo escenario cambiario, la población y el sector empresarial siguen a la espera de soluciones que estabilicen la disponibilidad y las tasas de cambio del dólar en Bolivia.
Con información de El Deber
