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Milagros Domínguez, integrante de Centro de Desarrollo de Electrónica Industrial del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), brindaba información a quienes se acercaban al stand del ITBA sobre el karting eléctrico y electrónico que el Instituto viene desarrollando hace 7 años.
“No genera contaminación alguna, más que la fabricación de las baterías que son de plomo y son nuestra principal traba. Idealmente deberían ser de litio o también se está estudiando la implementación de almacenamiento de energía en hidrógeno que es mucho más sustentable que cualquier batería que puedas encontrar”, contó la joven entusiasmada.
En cuando al objetivo del proyecto, el profesor investigador Nicolás Magliola compartió: “Lo que hacemos es un ‘laboratorio móvil’ porque la idea es hacer un karting eléctrico donde participen profesores y estudiantes en el desarrollo”.
Para él, “el futuro de la movilidad es la movilidad eléctrica” ya que “el nivel de contaminación que genera hoy un vehículo tradicional a nafta o a gasoil se puede reducir muchísimo usando vehículos eléctricos” e indicó que en la Argentina “se están dando los primeros pasos”.
A pocos metros del ingreso al predio se encuentra Marcos Aliaga, uno de los fundadores de un emprendimiento creado por 12 jóvenes en 2016 que vende a Argentina y Uruguay productos de cuidado personal que no usan plástico.
“Arrancamos con el cepillo de dientes de bambú que cumple la misma función que uno tradicional pero reemplazando el mango de plástico por uno de bambú y el packaging también de plástico por uno de cartón. Convertimos, así, un producto que va en detrimento de la naturaleza por otro que es 97% biodegradable y 3% reciclable que sería la parte de las cerdas”, detalló Aliaga.
Otros productos que elaboran son hisopos de bambú, hilo dental de almidón de maíz y una pasta de dientes en pastillas que se colocan en un envase de vidrio, además de su nuevo lanzamiento que es un shampoo y acondicionador sólidos conformadas por “barritas que duran 54 lavados, el equivalente a un frasco de medio litro”.
Otro de los puntos fuertes de la feria es el de arquitectura y energía. “Nuestra misión es diseñar viviendas que tengan una baja demanda energética para que la dimensión de las instalaciones que tengamos que poner renovables sea menor, o sea menos costosa”, dijo Gabriela Agostini, arquitecta y desarrolladora del proyecto, que resaltó que “la idea es sacar el mito de que la sustentabilidad es cara”.
