Ahora, sí: este será el nuevo nombre del banco BBVA Francés en Argentina
La compañía de capitales españoles desistió de su intención original de cambiar su denominación social por «BBVA Argentina SA». Ahora propuso denominarse de otra forma.
El BBVA Banco Francés, de capitales españoles, desistió de su intención original de cambiar su denominación social por «BBVA Argentina S.A.», tal como había comunicado públicamente a comienzos de marzo pasado, y propuso ahora denominarse como «Banco BBVA Argentina S.A.».
La entidad, ubicada en el tercer lugar por su patrimonio y en el ranking de depósitos entre las entidades privadas que operan en el país, comunicó la modificación en una nota enviada a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
La solicitud del cambio propuesto inicialmente fue rechazada por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) a comienzos de mayo.
Según aclaró la autoridad monetaria, las normas vigentes establecen que «las denominaciones de las entidades financieras deben especificar en forma inequívoca la clase a que pertenecen» y «no se admitirán aquellas que se presten a confusiones o interpretaciones erróneas».
El directorio de la entidad financiera decidió entonces incluir en su proyecto de reforma del estatuto social la denominación «Banco BBVA Argentina S.A.».
En marzo la entidad había explicado que «por decisión del holding, en BBVA Francés se ha iniciado una transición a la marca global ‘BBVA’, lo que implica que todos los activos identificados con marcas locales pasarán a ser identificados con la marca única ‘BBVA'».
La «conveniencia» de migrar a una marca global fue informada por el presidente del banco, Jorge Carlos Bledel, en reunión de directorio.
Entre las razones esgrimidas el directivo dijo que «en el contexto de la transformación digital que el banco viene transitando, la presencia de una marca global es considerada un factor imprescindible para lograr una rápida evolución en términos de servicios financieros digitales».
Eso, añadió, se traduce en importantes beneficios tales como: eficiencia de costos a largo plazo; nacimiento de sinergias globales; mayor facilidad para lograr una expansión a nuevos mercados / sectores; mejoras en la credibilidad digital; y aumento en el valor de la marca.
El cambio de denominación es considerado «un hito clave para competir más efectivamente en los mercados digitales», dado que «al tratarse de una marca consistente genera mayor confianza en el consumidor y aporta beneficios adicionales en términos de calidad».
«La marca ‘BBVA’ es considerada más digital que ‘Francés’, y por ello es que una transición en este sentido aceleraría un cambio en la percepción del banco tradicional a una entidad de asesoramiento financiero digital», resumió Bledel.
