A medida que se estabiliza el crecimiento minorista, las empresas de bienes de consumo masivo deben comprender qué cambios en el comportamiento de los compradores persistirán y cómo pueden establecer una base de crecimiento sólida.
La pandemia mundial tuvo un gran impacto en los bienes de consumo masivo, lo que resultó en un crecimiento sin precedentes, en particular para las categorías y marcas para llevar a casa. Durante la incertidumbre de 2020, más hogares compraron con más frecuencia que durante los tiempos anteriores a COVID y compraron más en términos de recuento de paquetes. Los minoristas tuvieron que ajustar rápidamente los formatos y las experiencias en la tienda para satisfacer las necesidades y demandas de los compradores de COVID-19.
A medida que el crecimiento se reduce, tanto las marcas como los minoristas deberán determinar un enfoque más sostenible para satisfacer las necesidades de los compradores. Para la industria de bienes de consumo, el mayor desafío que se avecina es comprender cuántos de los cambios en el comportamiento del comprador son a largo plazo y qué se puede hacer para construir una base de crecimiento en la tienda después de la pandemia global.
A medida que salimos de la tormenta y entramos en la siguiente fase de cambio, nuestro libro blanco puede ayudarlo a comprender en qué cambios y demandas debe enfocarse. Esta guía también lo ayudará a priorizar una estrategia y determinar los pasos cruciales a seguir para continuar ganando en un mercado retraído. Dado que se espera que el crecimiento del FMCG crezca entre un 2,2% y un 5,2% en 2021 (frente a un 10% o más en 2020), querrá asegurarse de reconstruir los fundamentos de una base sólida de crecimiento para su negocio.
