Los minoristas deben incluir notificaciones, especialmente por correo electrónico, en sus estrategias promocionales de regreso a clases.
Según una encuesta reciente de más de 2.000 adultos estadounidenses realizada por la plataforma de comunicaciones en la nube Plivo, casi nueve de cada 10 encuestados (87%) están abiertos a recibir comunicaciones de los minoristas con los que compran o quieren comprar, con un porcentaje aún mayor (94%). entre los encuestados que planeaban hacer compras para el regreso a clases.
De los encuestados que planean comprar artículos para el regreso a clases, el 70% prefirió las notificaciones por correo electrónico, el 53% prefirió los SMS / mensajes de texto y el 32% prefirió el correo directo. Sin embargo, solo el 27% de los compradores de regreso a la escuela estaban abiertos a la mensajería en la aplicación, mientras que el 26% estaban abiertos a recibir llamadas telefónicas.
Los compradores de vuelta a la escuela mayores de 65 años tenían la misma preferencia por el correo electrónico (70%) que los encuestados en general, pero eran mucho más propensos a preferir el correo directo (65%). La preferencia entre los compradores de regreso a la escuela en esta cohorte de edad por las comunicaciones por SMS (19%) y llamadas telefónicas (7%) fue menor que entre la base general de encuestados. Por el contrario, los encuestados más jóvenes entre las edades de 18 y 34 años prefieren el correo electrónico (65%) y los SMS (56%), y menos prefieren el correo directo (24%).
La encuesta también encontró que los compradores de regreso a la escuela están bastante abiertos a optar por muchos tipos de notificaciones por SMS. Éstos incluyen:
- Avisos y actualizaciones de envío / entrega (58%).
- Cupones (57%).
- Promociones de venta (51%).
- Notificación de que el producto vuelve a estar disponible (42%).
- Recogida en la acera (37%).
- Notificaciones de nuevos productos (34%).
En su mayor parte, la probabilidad de que los encuestados opten por las notificaciones de texto de los minoristas aumenta con sus ingresos y nivel de educación. Casi nueve de cada 10 (88%) encuestados con un ingreso de menos de $ 50,000 dijeron que optarían por participar, mientras que el 95% de aquellos con ingresos superiores a $ 100,000 optarían por hacerlo. Mientras tanto, el 85% de aquellos con una educación secundaria o menos optaría en, mientras que de aquellos con un título universitario o más, el 94% optaría por participar.
Según el análisis de Plivo, los resultados de la encuesta revelan que los compradores de regreso a clases están más interesados en ofertas y actualizaciones de pedidos existentes. Plivo dice que estos encuestados probablemente tengan listas de suministros o artículos específicos en mente en esta época del año, por lo que están buscando comunicaciones que los ayuden a encontrar lo que necesitan, a un buen precio, entregado cuando lo deseen.
Los datos recientes de la Federación Nacional de Minoristas (NRF) sobre el gasto de regreso a la escuela sugieren un sólido potencial de retorno de la inversión para las inversiones de los minoristas en mensajería. La NRF espera que los consumidores gasten cantidades récord en útiles escolares y universitarios mientras los estudiantes se preparan para regresar a las aulas en persona.
Según los datos de la encuesta anual publicados por NRF y Prosper Insights & Analytics, los encuestados con niños desde la escuela primaria hasta la secundaria planean gastar un promedio de $ 848.90 en artículos escolares, que es $ 59 más que en 2020. Total de regreso a la escuela K-12. Se espera que el gasto alcance un récord de $ 37,1 mil millones, frente a los $ 33,9 mil millones en 2020 y un máximo histórico en la historia de la encuesta.
Mientras tanto, los estudiantes universitarios y sus familias planean gastar un promedio de $ 1,200.32 en artículos para la universidad, un aumento de $ 141 desde 2020. Más de la mitad ($ 80) del aumento proyectado en el gasto universitario se debe a un aumento en el gasto en electrónicos y muebles para dormitorios. Se espera que el gasto total de regreso a la universidad alcance un récord de $ 71 mil millones, frente a $ 67,7 mil millones en 2020.
