Argentino y uruguayo unen experiencia para crear Gin artesanal premium

Ginebra

Marcelo López, un empresario tecnológico uruguayo, y Ángel Ghiazza, un emprendedor argentino con experiencia en alimentos, se han unido para crear Sur 34 Gin, un gin artesanal premium con la ambición de conquistar el mercado internacional. La idea surgió cuando López, cofundador de empresas como UruIT y Nearsure, se encontró con la creciente popularidad del gin artesanal en Nueva York y decidió embarcarse en un proyecto sensorial y tangible relacionado con esta bebida.

Ghiazza, por su parte, había incursionado en la producción de un gin premium en Buenos Aires antes de mudarse a Colonia, Uruguay, donde se cruzó con López. Compartían una pasión por esta bebida y comenzaron a experimentar con las mismas especias y buscar un resultado similar. Esto los llevó a crear Sur 34 Gin después de una inversión de $250,000 y la instalación de una destilería en Colonia.


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La destilería utiliza maquinaria de última tecnología importada desde Holanda, con un enfoque en la sostenibilidad, reflejado en las botellas importadas de Europa con vidrio 100% reciclado. La capacidad de producción de la destilería es de alrededor de 100,000 litros al año, pero inicialmente planean embotellar 1,000 litros de gin al mes.

Su plan de expansión incluye llegar a los mercados de EE. UU., Brasil, Paraguay, México y Argentina, colaborando con importadores que trabajan con productos premium uruguayos. Uno de los aspectos distintivos de Sur 34 Gin es su proceso de producción, que implica la compra de alcohol en el extranjero y su posterior redestilación para mejorar la calidad. También utilizan cáscara de mandarina criolla como botánico, lo que le da un toque local y un sabor cítrico único.

Sur 34 Gin busca ofrecer una experiencia premium y planea ofrecer visitas a la destilería para que los visitantes puedan conocer más sobre esta bebida artesanal. Con su visión de crecimiento internacional, esperan que Uruguay represente solo el 10% de su facturación en el futuro.

Con información de Antonio Larronda de El País