Sostenibilidad: Valenciaport consolida sus políticas de sostenibilidad

 

La sostenibilidad, entendida como la promoción y protección del medio ambiente, es una inquietud pujante en el tejido social. Y es que, cada vez son más las personas y, por ende, entidades sociales y económicas, que integran prácticas sostenibles en su actividad diaria o metodología de trabajo con el único fin de preservar el medio natural.

En este sentido, la Autoridad Portuaria de València (APV) mantiene su apuesta por la ejecución respetuosa de su actividad logística a través de sus diversas medidas de seguridad multidisciplinar, estructuradas en ocho campos de actuación diferenciados. Así, las políticas safety de Valenciaport engloban ámbitos como la seguridad industrial y laboral, las mercancías peligrosas, la protección de las instalaciones, la Policía Portuaria, la seguridad marítima, la ciberseguridad y la seguridad ambiental. Es esta última la que ha fijado un ambicioso objetivo para la dársena valenciana: convertirse en un puerto autosuficiente y de cero emisiones en el año 2030.


Banner_frasco-suscripcion-800x250

En este sentido, la sostenibilidad, extrapolada al sector marítimo, hace alusión a la calidad del agua y del aire, así como a los residuos, la generación de recursos, la gestión energética o la valorización de productos, entre otros aspectos. Pero, ¿cómo responde el Puerto de València a estos desafíos emergentes?

Valenciaport desarrolla, desde hace más de una década, planes de actuación que inciden en cada uno de los campos anteriormente mencionados. De hecho, actualmente se encuentran inmersos en la elaboración de un proyecto europeo cuya finalidad es la mejora de la calidad del aire. Para ello, han realizado un estudio de las fuentes de emisiones de partículas de gases en la dársena, que se verá implementado con la renovación, tanto de estaciones como de equipamiento, de las infraestructuras para adecuarlas a los nuevos requerimientos normativos, tecnológicos y sociales.

Respecto a la calidad del agua, también del agua de lastre, se han realizado analíticas para comprobar su estado en el Puerto de València.

Energías renovables: el futuro de Valenciaport

El visto bueno de la Conselleria de Territorio y Medio Ambiente, así como de la de Economía, a la construcción de la subestación eléctrica del Puerto de València no solo pone fin a más de dos años de bloqueos burocráticos, sino que materializa la gran apuesta del recinto del Grao por las energías renovables.

Según reconocen desde la APV, «estamos haciendo mucho énfasis en el uso de energías renovables, lo que va a suponer una significativa reducción de la huella de carbono y un gran salto cualitativo». Es decir, la eficiencia de la gestión energética en el desarrollo de una actividad, carga y descarga, principalmente, en el supuesto de Valenciaport.

Una tendencia constatable, pues desde que se iniciasen los proyectos de sostenibilidad energética en la dársena valenciana en el año 2008, la huella de carbono se ha reducido más de un 17 %, pese al aumento de casi 25 puntos porcentuales del tráfico marítimo. Un dato que consolida a Valenciaport como un puerto altamente eficiente y demuestra la proactividad de la entidad. Además, los sistemas de medición empleados poseen la certificación ISO 14000 e ISO 16000.

Así, actualmente el 40 % de la flota de vehículos de la autoridad portuaria ya es híbrida o eléctrica, del mismo modo que determinados buques, como los remolcadores de menor envergadura, utilizan motores eléctricos. Y es que, entre las acciones emprendidas por la entidad presidida por Aurelio Martínez se encuentra la incorporación de maquinaria eficiente que sustituya el combustible fósil por la electricidad o el Gas Natural Licuado (GNL). No obstante, desde la APV se está realizando un estudio sobre la utilización del hidrógeno en la maquinaria portuaria. De concretarse, también se instalaría una fuente de suministro en las instalaciones del recinto del Grao.

Esta infraestructura de hidrógeno complementaria a la subestación eléctrica anteriormente citada. Se trata de un proyecto de uso de tecnologías alternativas, entre las que destaca la energía fotovoltaica. De hecho, ya se trabaja en tres proyectos específicos en periodo de licitación: la instalación de dos paneles fotovoltaicos en el Puerto de València y un tercero en el Puerto de Gandia.

Y es que, el futuro energético de la APV también aspira a contar con una estación fotovoltaica en el silo de Grimaldi, cuya previsión es que genere el 10 % de la energía que consume el Puerto de València. Pero, ¿dónde se usa toda esa energía?

Como explican desde autoridad portuaria, las fuentes fundamentales del uso de energía son maquinariabuques -se persigue la implantación de combustible GNL-, transporte terrestre y servicios náuticos que dan apoyo a las embarcaciones.

Unas políticas sostenibles que dan cumplida respuesta al fuerte compromiso de la APV con la sociedad valenciana y, por ende, a la española de ser útil a la economía, al ser puerto esencial para la entrada y salida de mercancías y estar alineado con los mayores retos y exigencias de sostenibilidad de ámbito internacional.

Banner_azules
Reciba las últimas noticias de la industria en su casilla:

Suscribirse ✉