En su primer año como presidenta ejecutiva de Inditex, Marta Ortega ha superado con creces las expectativas. La compañía ha mantenido su liderazgo en el sector de la moda, con una facturación récord de 25.609 millones de euros en los nueve primeros meses del ejercicio.
Este desempeño se ha apoyado en dos pilares fundamentales: la transformación de posicionamiento de Zara, la cadena principal del grupo, y la eficiencia de la cadena de suministro.
En el caso de Zara, la compañía ha apostado por elevar su posicionamiento hacia una estética de moda más elevada. Para ello, ha lanzado colecciones de precios más elevados, ha colaborado con otras marcas de moda y ha organizado exposiciones de fotografía.
En cuanto a la cadena de suministro, Inditex ha seguido optimizando su red de tiendas y ha normalizado sus niveles de inventario. Además, la compañía ha reforzado su perfil institucional, impulsando entidades como la Asociación Retail Textil España (Arte) y el primer sistema colectivo de responsabilidad ampliada del productor (Scrap).
Estos cambios han tenido un impacto positivo en los resultados de la compañía. El margen bruto se ha expandido en 67 puntos básicos, hasta el 59,4%. Además, la empresa ha dejado atrás su previsión clásica de “margen bruto estable (más/menos 50 puntos básicos)” y anticipa para el conjunto del ejercicio un aumento de 75 puntos básicos.
En definitiva, Inditex ha comenzado su segunda era Ortega con buen pie. La compañía ha demostrado que es capaz de adaptarse a los cambios del mercado y seguir liderando el sector de la moda.
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Los cambios que ha impulsado Marta Ortega en Inditex son una respuesta a la evolución del mercado de la moda. La sostenibilidad, la calidad y la exclusividad están ganando protagonismo entre los consumidores, y el fast fashion, el modelo de negocio que inventó Inditex, está perdiendo terreno.
La compañía gallega ha entendido que para seguir siendo líder necesita adaptarse a estas tendencias. Por ello, ha apostado por elevar el posicionamiento de Zara, su cadena principal, y por reforzar su perfil institucional.
Estos cambios están dando sus frutos. Inditex ha mantenido su liderazgo en el sector, con una facturación récord en los nueve primeros meses del ejercicio. La compañía está demostrando que es capaz de seguir siendo relevante en un mercado que está cambiando rápidamente.
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