La falda Shakira ha llegado a Zara y –aviso– provoca sentimientos encontrados
Shakira fue la primera en darle una oportunidad y ahora, con el inicio del nuevo curso, la falda pantalón de Zara adquiere contexto: ¿tenemos uniforme nuevo en la oficina?
¿Es una falda? ¿Un pantalón? ¿Es más de vestir o de salir? ¿Es práctica o todo lo contrario? Hay una nueva falda pantalón de Zara que genera todo tipo de incógnitas y una única certeza: si es tendencia es gracias a Shakira.
Experta en desafiar las leyes de la moda (¿Converse vaqueras de plataforma? ¿Corsé con pantalón de chándal? ¿Quién da más?), si hubiera que determinar un básico sobre el que Shakira ha construido su fondo de armario post-ruptura sería la provocación. Ajena a las críticas y a las convenciones establecidas, la cantante ha logrado mantenerse muy por encima de los comentarios negativos, siempre segura, siempre sonriente, entre otras cosas, gracias a sus arriesgadas elecciones de estilo. Sin ir más lejos, esas incondicionales zapatillas Converse que la elevan varios centímetros sobre el terreno más pantanoso y en cuya suela ha encontrado la mejor plataforma para expresarse.
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Lejos de recurrir a lugares frecuentes y, por tanto, seguros, la cantante parecía tomar el camino alternativo hacia el autoconocimiento, ese que consiste en experimentar con todos los límites de la zona de confort y exponerse a todo tipo de obstáculos solo para comprobar con satisfacción que no existen pendientes inalcanzables –ni siquiera las de las sandalias doradas más vertiginosas– cuando te has propuesto ascender con paso firme hasta la cima.
Resulta que sí que se podía decir más alto y más claro que con aquella sesión #53 con Bizarrap. Para muestra, aquella gabardina de Viktor & Rolf con la palabra NO escrita en relieve. Dos letras que, las gemelas insisten, forman una frase completa y forman un mensaje muy contundente de insumisión. No, Shakira ni es ni viste como el resto. Shakira un día lleva pantalones de rave y al siguiente minivestido sexy. Y llegado el caso, todo a la vez. Como con aquella falda pantalón con la que acudió al desfile de Fendi. ¿Por qué elegir cuando puedes tenerlo todo? ¿Por qué repetir cuando puedes innovar? ¿Por qué complacer cuando puedes inspirar? O dicho de otra manera, ¿por qué seguir las tendencias cuando puedes inventarlas?
Y es que la falda pantalón de Shakira no solo combinaba dos tendencias clave del otoño-invierno 2023/2024 –el pantalón de traje y la falda oficinista– sino que además lo hacía de manera original, irreverente, lo dicho, provocadora, incorporando un nuevo elemento al debate generacional sobre lo que entiende la moda por falda pantalón.
¿A qué llaman las tendencias del otoño 2023 falda pantalón?
Para algunas, se trata de una falda corta que esconde un pantalón en su interior apenas visible. También denominada skort por la contracción en inglés de las palabras skirt (falda) + short (pantalón corto). Para otras, son esos pantalones culotte con perneras de vuelo tan anchas que a simple viste apenas pueden diferenciarse y, por tanto, parecen una falda.
Finalmente, la falda pantalón adquiría una nueva definición y presencia en las tendencias del otoño 2023 gracias a Shakira: un pantalón de vestir con una sobrefalda corta encima que suscita todo tipo de conflictos y opiniones polarizadas pero, al mismo tiempo, también aporta una solución alternativa al debate sobre las medias de cristal en invierno.
Tendencia en sus tres formas, la falda pantalón de Zara como la de Shakira también puede interpretarse como una muestra de desobediencia, un alarde de personalidad y un guiño al inconformismo al combinar la falda de tablas y el pantalón sastre, dos piezas a priori antagónicas –el pantalón hegemónicamente monopolizado por ellos, los altos ejecutivos; la falda típicamente asociada a ellas, colegialas o secretarias– en una sola: ¿será la falda pantalón el uniforme de las jefas de la moda en otoño de 2023?
Así lo postula Inditex al incluirla entre sus novedades para el inicio del nuevo curso, en el mes de la rentrée y de las mezclas imposibles muy acordes con el inestable clima del entretiempo.
Como una versión evolucionada y sofisticada de aquellas minifaldas vaqueras con leggings de las tendencias de los años 2010 y bautizada en honor a la mujer que hizo que fuera, si no posible, al menos un poco menos impensable, la falda pantalón de Zara, al combinar dos elementos tradicionales de la indumentaria de oficina se rebela contra la ropa conservadora de trabajo, sin abandonar el cajón de lo políticamente correcto. Es una falda y es un pantalón, dos clásicos y al mismo tiempo una tendencia única que, si en algo pone a la gente de acuerdo, es en que no es apta para todos los gustos.
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