Nelo, la firma especializada en el modelo «compra ahora, paga después», ha detectado una oportunidad en el financiamiento al consumo, y ahora diversifica su oferta con una tarjeta de crédito física que se destacará por su sencillez para los usuarios.
En una entrevista, los directivos de Nelo indicaron que dentro de su ecosistema de usuarios se identificó la necesidad de una tarjeta de crédito física para poder comprar en cualquier comercio que acepte este método de pago, además de la opción virtual que ya ofrecían desde el inicio de su aplicación en marzo de 2021.
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«Los clientes tendrán dos opciones para pagar: una, podrán pagar sin intereses después de la fecha de corte o dos, podrán crear un plan de pago quincenal. Creemos que tarjetas o productos tradicionales, con saldos revolventes, son productos difíciles de entender y a nuestros clientes les gustan los planes de pagos muy específicos, claros, sin sorpresas», comentó Kyle Miller, cofundador y director general de Nelo.
Después de más de dos años de operación, Nelo ha realizado 6 millones de transacciones en línea mediante su aplicación de «compra ahora, paga después». Con esta base, la empresa incursionará en el universo de tarjetas de crédito en México.
«Nuestra principal característica debe ser la comprensibilidad. Hemos diseñado este producto no como una tarjeta tradicional con saldo revolvente, que puede ser confuso de entender, sino que buscamos simplificarlo y ser completamente transparentes», detalló Alejandro Villalobos, vicepresidente de Finanzas y Partnerships de Nelo.
Además, Nelo ha anunciado su integración con Google Wallet, permitiendo a sus clientes realizar pagos sin contacto desde sus dispositivos Android.
La tarjeta de crédito de Nelo será otorgada inicialmente a usuarios de su aplicación con un buen historial de pagos, y gradualmente se extenderá a otros usuarios con el tiempo.
Fundada en 2019 por exlíderes de expansión internacional de Uber, Nelo ha recaudado más de 25 millones de dólares en inversiones de capital de riesgo y cuenta con una línea de crédito de 100 millones de dólares otorgada por Victory Park Capital. La empresa ha demostrado un desempeño sólido y se enfoca en mejorar sus procesos y modelos para otorgar crédito de manera responsable.
Esta nota apareció primero en El Economista
