El auge de los pagos digitales en América Latina y Chile se impulsa por varios factores, como la preferencia de las nuevas generaciones, la inclusión financiera y la innovación tecnológica.
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Según el informe Global Payments Report (GPR) 2023 de FIS, que analiza las tendencias de pagos en América Latina, hay cuatro características destacadas en el crecimiento del comercio electrónico en la región: las tarjetas de crédito siguen siendo la opción principal para las compras en línea, el comercio móvil y los pagos A2A están ganando terreno, y los pagos móviles continúan aumentando mientras el efectivo disminuye.
En el caso de Chile, las tarjetas de crédito dominan el panorama de pagos, representando el 60% del comercio electrónico y el 66% del valor de las transacciones en puntos de venta en 2022. Las tarjetas de débito (29%) también tienen un papel relevante en el comercio electrónico, mientras que en los puntos de venta el débito (34%) es el método de pago principal, seguido por las tarjetas de crédito (27%).
La tendencia global muestra una disminución en el uso de efectivo, pasando del 27% del valor de las transacciones en puntos de venta en 2021 al 23% en 2022. Se proyecta que el efectivo disminuya aún más, alcanzando un -11% de Tasa de Crecimiento Anual Compuesta hasta 2026.
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Además, la preferencia de pago varía según la generación. Los Millennials han impulsado el crecimiento de negocios basados en tecnología y soluciones móviles, lo que ha llevado a una modernización en aspectos como la seguridad y la agilidad de las transacciones. Ahora, la Generación Z, compuesta por personas nacidas entre 1996 y 2012, está ingresando al mundo laboral y profesional, generando un mayor poder adquisitivo y demandando experiencias de compra ágiles y seguras.
Ante este panorama, el ecosistema de pagos se enfrenta al desafío de adaptarse a las nuevas formas de compra y pago, ofreciendo experiencias omnicanal sin fricciones, tanto en el ámbito físico como en el digital. La captación de estos nuevos usuarios digitales representa un reto para los bancos, por lo que se requiere una continua innovación en soluciones de pagos para garantizar una experiencia de calidad a este creciente nicho de mercado.
