«Tú, siéntate. Cállate… ¡y escucha! Tienes que meterte algunas cosas en la cabeza si quieres triunfar en este juego. ¿De acuerdo?». Así comienza su discurso el protagonista de la última entrega de Nike: un viejo balón de fútbol animado repleto de estereotipos sobre la masculinidad en este deporte.
La acción, ideada por Wieden+Kennedy Londres, forma parte de la campaña que la icónica marca presentó a comienzos de mayo, «Play New», en la que invita a experimentar con el deporte, probando nuevas aficiones y retándonos a nosotros mismos mientras disfrutamos de la actividad física.
En este caso, la pieza llamada «Toxic Football» aborda los estereotipos tan extendidos sobre la masculinidad en el fútbol con un mensaje a la inversa que, de forma simbólica, acaba siendo rechazado por una patada propinada por Marcus Rashford, jugador del Manchester United que aboga por diversas causas sociales.
Acento inglés y un mensaje «pasado de moda»
«En primer lugar, ¡tienes que ser codicioso! Busco esa vena desagradable. No pides, tomas. O eres la estrella del espectáculo o eres un perdedor», gruñe el balón- con un fuerte acento inglés- repleto de anticuados consejos.
De esta forma, Nike ha querido simbolizar el lado más tóxico de este deporte, que no solamente afecta a la desigualdad de género en el fútbol, sino que también estigmatiza la figura «masculina» que debe tener un hombre para considerarse un buen jugador.
Además de esta pieza, Nike ha lanzado otro spot llamado «New Girl», pero esta vez dirigido de forma más concreta al mercado japonés. La pieza de Wieden+Kennedy Tokyo aborda de forma casi surrealista la enorme disparidad de oportunidades entre hombres y mujeres en Japón, a partir de la presión que experimenta una mujer embarazada cuando se entera de que tendrá una hija en vez de un hijo varón.
Además de la crítica abierta a la falta de igualdad de género en el país nipón, Nike también denuncia la crítica que hay hacia la atletas japonesas al retomar el deporte tras dar a luz.
