La zapatilla también viene vestida con motas de «Sail» y «Light Silver», mientras que la base «Fir» se ha construido con una parte superior de nylon y superposiciones de gamuza. Mientras tanto, el Swoosh habitual ha sido golpeado con cuero blanco, con el mismo detalle de hacerse cargo de las lengüetas del talón a juego, lenguas, y la marca de la plantilla. La marca Nike bordada se asienta sobre una entresuela blanca, la banda «Light Silver» y la suela de goma «Sail» para redondear el diseño.
Nike Cortez, las zapatillas con nombre de conquistador
Cuando se fundó Nike, era una startup que no fabricaba sus propias zapatillas. Ni siquiera se llamaba Nike: Se trataba de Blue Ribbon Sports, cofundada por Bill Bowerman, el legendario entrenador de atletismo de la Universidad de Oregón, y Phil Knight, un empresario al que Bowerman había entrenado en el pasado.
Nike lleva un 2023 de vértigo con las Nike Cortez. En los últimos meses hemos visto el lanzamiento de modelos como las Nike Cortez Pale Ivory, las Nike Cortez blancas y negras, las Supersonic, las de Kill Bill, las Nike Cortez de Clot o las ultimísimas Nike Cortez Premium.
Ahora, Nike sigue utilizando su silueta Cortez como lienzo para la experimentación. Recientemente, la zapatilla se ha presentado en una serie de interpretaciones de colaboración – con los aspectos más destacados que vienen en forma de la sacai y UNION – y ahora, el Swoosh está tomando las cosas de nuevo a lo básico con un nuevo colorway de lanzamiento general con la silueta que viene en un nuevo esquema de color «abeto».
Los dos cofundaron Blue Ribbon Sports como una operación de venta al por menor. Blue Ribbon firmó un contrato para distribuir calzado de Onitsuka Tiger, un fabricante japonés que quería introducirse en Estados Unidos.
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En sus memorias de 2016 Shoe Dog, Phil Knight escribe que Onitsuka envió a Bill Bowerman y Phil Knight un prototipo de zapatilla en el que estaban colaborando en 1967: la empresa quería sugerencias sobre un nombre. Con los Juegos Olímpicos de 1968 celebrados en México a la vuelta de la esquina, a Bowerman se le ocurrió «The Aztec», un homenaje a los mesoamericanos que habitaron lo que con el tiempo se convertiría en México.
Sin embargo, había un problema: adidas ya había lanzado una zapatilla de atletismo llamada Azteca Gold, y amenazaba con demandar si no se cambiaba el nombre. El nombre Azteca estaba descartado.
El nombre Azteca no estaba disponible. Así que le pusieron el nombre del hombre que conquistó a los aztecas y tomó su capital, Tenochtitlan: Hernán Cortés, una clara señal para adidas de que la recién creada Blue Ribbon quería hacer ruido en el mundo del calzado.
