Charlotte Heidmann, directora de producto de calzado deportivo de Adidas, atiende a Relevo después de que Tigst Assefa pulverizara el récord del mundo de maratón.
Charlotte Heidmann posa con un modelo de zapatillas Adidas.
Hay muchas mentes detrás de las zapatillas del momento, pero una destaca por encima del resto. Seria, concisa y parca en palabras, signo inequívoco de un férreo carácter alemán, Charlotte Heidmann es desde hace años la encargada de supervisar el minucioso proceso de diseño de todo el calzado deportivo que sale de la fábrica de Adidas. No han sido una excepción las nuevas Adizero Adios Pro Evo 1, las armas con las que la etíope Tigst Assefa acaba de destrozar el récord del mundo de maratón en Berlín (2:11:53).
«No todo gira en torno al calzado, está claro, el trabajo y el esfuerzo del atleta sigue siendo lo más importante, pero la sensación es que hemos creado un pedacito de historia«, asegura Heidmann, que elige Relevo para valorar por primera vez unas zapatillas a las que todos definen ya como mágicas. «Bueno, es lo que hemos demostrado este fin de semana en Berlín, ¿no?», ironiza ella.
Lejos de cualquier suerte o hechizo, las Evo de Adidas, blancas impolutas y de suela prominente, son fruto de muchos meses de trabajo en la sombra. «El proceso es totalmente secreto, nadie sabe nada hasta que el modelo en cuestión aparece en la lista oficial de World Athletics«, apunta Heidmann al otro lado de la pantalla.
Tal es el así, que la pugna por innovar en términos de calzado deportivo toma cada vez más aspecto de carrera espacial. «Es una buena comparación, sí», opina la empresaria germana. «Es algo que se ha visto en este último proceso. El nuestro era un proyecto totalmente secreto, nadie sabía nada y de repente, pum, apareció a ojos del mundo en Berlín».
¿Pero por qué las Evo de Adidas han roto todos los esquemas? ¿Qué las diferencia del resto? O vayamos incluso más allá, ¿cuál es su secreto? Responde el cerebro detrás de todo el desarrollo creativo de la fábrica alemana. «Nada», sentencia Heidmann, impasible. «No hay ningún secreto, todo está a la vista de la gente. Es más, puedo explicarte cada componente de la zapatilla cuando quieras«. No se hable más.
Es ahí, mostrando uno de los escasos ejemplares de las Adizero Adios Pro Evo 1 —solo hay 521 pares en el planeta—, donde Heidmann se libera de verdad. «Todas las zapatillas tienen un componente clave, pero creo que este modelo es un todo», explica. «Desde un primer momento se ideó para que fuera un modelo más liviano que nunca. Por ello tiene esta suela de espuma [señala la parte indicada], que es súper delgada y ligera, pero a la vez muy compacta. En la parte superior [voltea la zapatilla], todo se junta aquí. La suela, por su parte, proporciona el agarre y la parte superior otorga comodidad, así que lo importante es juntarlo todo».
«A mí también me gustaría saber si Kipchoge hubiera batido su récord con nuestras zapatillas»
Directora de producto ‘footwear’ de Adidas
Durante el proceso de diseño de las Evo, Heidmann y su equipo viajaron a Kenia para recabar las opiniones de los atletas más importantes del mundo. «Es algo muy importante para nosotros», advierte desde las oficinas centrales de Adidas. «Allí recibimos feedback de muchos de los atletas que usaron las zapatillas el pasado domingo en la Maratón de Berlín: Tigsa Assefa, Amanal Petros, Benson Kipruto, Sheila Chepkirui…«.
Un grupo selecto en el que, eso sí, no estaba el rey indudable de la maratón, Eliud Kipchoge. Preguntada por si el plusmarquista keniano hubiera batido el récord del mundo (2:01:09) de haberse calzado las nuevas armas de Adidas, Heidmann no puede esconder la primera sonrisa de la charla. «Es una buena pregunta», asevera. «A mí también me interesaría saberlo, quizá podríamos preguntárselo… Al final, él es un atleta que está con Nike… Quién sabe lo que depara el futuro, ¡ya se verá!«.
En cualquier caso, centrada únicamente en la emblemática marca de las tres rayas, uno de los símbolos alemanes por excelencia, la directiva alemana advierte: «Lo que acabamos de ver en Berlín solo ha sido el principio«. Reacia a dar detalles de nuevos proyectos, que define una vez más como «secretos», Heidmann prefiere recalcar lo que aún define como inverosímil.
«Acabamos de hacer historia y creo que vamos en una muy buena dirección. Veremos cómo siguen la estela el resto de marcas, pero les hemos puesto el listón muy alto«, sentencia. «Al final, se ha corrido la maratón dos minutos más rápido que la anterior plusmarca, sí, pero también se ha batido el récord de Alemania y muchísimas marcas personales. Todo eso también suma. Y todavía nos queda mucho por hacer en las maratones de Chicago [8 de octubre] y Nueva York [5 de noviembre]. No puedo esperar para seguir haciendo historia».
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