La compañía MB&F ha lanzado un nuevo modelo, el HM8 Mark 2, que presenta una curiosa caja que toma inspiración de la vista posterior de este vehículo
Vendido por 5,8 millones de euros un reloj de lujo del último emperador chino. Así es el nuevo reloj de MB&F inspirado en el Porsche 918 Spyder
El reloj HM8 Mark 2, nombre con el que ha sido bautizado el que es su modelo más avanzado tecnológicamente hasta la fecha, toma inspiración de la silueta de la carrocería del icónico Porsche 918 Spyder y de la tradicional forma de doble burbuja del techo de la mayoría de las carrocerías de Zagato, en el que se basa la forma del cristal de zafiro de la parte superior que deja ver parte de la maquinaria con algunos elementos en oro de 22 quilates.
El precio de este exclusivo modelo es de 74.000 euros
La ‘carrocería’ de este diseño, disponible en color blanco o verde británico de competición, es de CarbonMacrolon –un material sólido que pesa ocho veces menos que el acero– con un acabado mate en la parte superior y muy pulido en los laterales.
La versión blanca lleva una masa oscilante con revestimiento CVD verde e índices de los minutos de color verde claro, mientras que la otra versión, que está limitada a 33 unidades, muestra una masa oscilante y el volante en oro rojo y los índices en color turquesa. La masa oscilante que presenta una forma de hacha de guerra y que da impulso al movimiento es realmente compleja de fabricar, ya que una de las cuchillas de oro de 22 quilates tiene un grosor de apenas dos décimas de milímetro, lo que muestra la gran artesanía de la que presume la firma.
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El visor de la hora de este diseño recuerda a un velocímetro tradicional
En el interior, o bajo el capó como indican desde la compañía, hay un chasis de titanio el cual se ha sometido a una operación de fresado extremadamente compleja y una maquinaria basada en un calibre de Girard-Perregaux. La novedosa corona posee un sistema de ‘doble desembrague’ y se opera empujando la corona contra la caja y girándola tres cuartos de vuelta para liberarla. Este planteamiento presenta dos grandes ventajas: se ahorra espacio y el sistema se vuelve más seguro, un aspecto fundamental en un reloj de corte deportivo.
El detalle que más llama la atención de este diseño es que la hora no se ve en la parte superior, sino que cuenta con dos visores de cristal de zafiro, uno para la hora y otro para los minutos, situados en un lateral de la caja, justo por encima del enganche de la correa de piel de becerro. Esta disposición recuerda a un velocímetro tradicional.
Aquellos que deseen hacerse con este reloj deberán pagar 74.000 euros
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