Perú: ¿hay espacio para más operadores móviles?

 

El sueño de tener siete u ocho operadores móviles activos gracias al ingreso de unos cuatro nuevos actores que utilizan la modalidad OMV, es decir, que no tienen su propia red sino que alquilan la de un tercero, no se ha podido concretar. Tras cuatro años de tener una intensa competencia entre cuatro jugadores con red (Entel, Bitel, Movistar y Claro), solo uno de los cuatro inscritos para operar como OMV está 100% activo.

¿Por qué no ha fructificado la oferta de OMV tal como sucede en Chile, México o Colombia? Los expertos coinciden en que la intensa competencia de precios que ha vivido el mercado local ha sido el principal factor que dificultó el lanzamiento y desarrollo de los OMV.


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Gonzalo Ruiz Díaz, ex presidente de Osiptel, explica que el mercado peruano ya tenía un ARPU (gasto por usuario) muy bajo y este siguió bajando con la intensa competencia, lo que afectó los márgenes de operación e hizo difícil que un OMV ofreciera mejores ofertas, más aun cuando se dirigían a consumidores prepago que están buscando precio.

Inkacel es una empresa de capital español que al cierre del 2017 poseía 86.516 clientes móviles en el país.

La OMV Inkacel es una empresa de capital español que al cierre del 2017 poseía 86.516 clientes móviles en el país.

Los OMV, al alquilar la red de otro operador, están sujetos a una tarifa negociada con ellos y no tienen flexibilidad para bajar las tarifas respecto de ese valor. Aitor Arteta, gerente del OMV Incacel, acepta que lograr ofertas competitivas que les permitan ser rentables es uno de sus principales problemas. Como estrategia están optando por lanzar en mayo ofertas de microrrecargas de mayor duración para lograr un factor diferencial y atraer a esos clientes que solo quieren recibir llamadas.

“Es importante entender que el mercado móvil peruano tiene problemas de sostenibilidad y no resiste un operador móvil más. El Perú cuenta con el margen Ebitda [ganancias menos impuestos] más bajo a nivel mundial, no hay margen para los operadores actuales y menos para operador de nicho con mucha menor escala”, apunta Alejandro Jiménez, ex gerente de Osiptel.

EXPERIENCIAS COMPLICADAS
La historia de los OMV arrancó en el Perú con Virgin, una marca de éxito global que decidió lanzar su oferta en agosto del 2016. A diferencia de su experiencia en países vecinos, aquí solo duró un año. Le dejó la posta a Incacel, que cambió el foco y dejó a los jóvenes rebeldes de la británica por el de los usuarios de menores ingresos que buscan hacer microrrecargas.

Virgin Mobile

(Foto: Archivo El Comercio)

Pero a Incacel tampoco le ha ido de maravillas, pues se mantiene en alrededor de 8 mil líneas activas. En lugar de crecer ha sincerado sus cifras y conservado solo los usuarios con recargas frecuentes, dando de baja a más de 50 mil usuarios no frecuentes que heredó de Virgin. Su sostenibilidad viene de otros negocios paralelos más rentables. Uno es el de los teléfonos públicos (ya tienen 1.500 instalados en diversas bodegas a nivel nacional) que también permiten hacer recargas a otros operadores (Bitel o Entel) y el servicio de transporte de datos en la selva.

El fracaso local de Virgin se debió a varios factores. Ruiz Díaz estima que le faltó creatividad y estrategias comerciales adecuadas, pues se dedicaron a replicar la estrategia usada en otros países sin analizar las características e idiosincrasia del consumidor peruano.

En su momento, Virgin dijo que el cambio de reglas –incluir el uso del lector biométrico de la huella dactilar– les generó un nuevo sobrecosto que restaba rentabilidad. Incacel, su sucesor, admite que esa sigue siendo una traba y fue una de las razones por las que el OMV chileno Simple, con el que habían pactado trabajar, se retractara de ingresar.

De los otros tres OMV registrados ante el MTC, solo uno está en pleno proceso de lanzamiento y ofrece un producto de nicho diferenciado, dirigido a las corporaciones que usan radios y requieren además en el mismo equipo una alta disponibilidad de telefonía móvil. Se trata de Dolphin, que rediseñó su estrategia y debió recurrir en varias oportunidades al regulador para lograr una tarifa de alquiler decente que le permita un ritmo satisfactorio de crecimiento.

dolphin

Dolphin rediseñó su estrategia y debió recurrir en varias oportunidades al regulador para lograr una tarifa de alquiler decente que le permita un ritmo satisfactorio de crecimiento.

El otro OMV a la vista, Cuy Mobil, también ha recorrido un largo sendero y ha pospuesto su lanzamiento una y otra vez. De fines del 2018 pasaron al primer trimestre del 2019 y ahora se estima que salen en el tercer trimestre. Y el cuarto registrado, Famagusta, nunca despegó ni pidió, como los otros, la mediación del regulador.

¿Un cambio en las normas les permitiría despegar? No hay consenso entre los expertos al respecto, pero sí coinciden en que, aun si eso sucediera, sería poco probable que, en las condiciones actuales del mercado, logren alzar vuelo rápido.

 

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