«Nuevos peligros de la IA», es el tema que nos propone David Castro, Consultor de ciberseguridad, ITQ Latam.
Según una investigación realizada recientemente por especialistas de las Universidades de Surrey, Durham y la Royal Holloway de Londres, la inteligencia artificial (IA) podría ser utilizada por hackers para deducir contraseñas mediante el análisis del sonido generado al teclear durante una videoconferencia en Zoom, logrando una asombrosa precisión del 93%, como señala Deutsche Welle (DW).
En efecto, la tecnología de reconocimiento de audio y análisis de sonido ha avanzado considerablemente en los últimos años. Y aunque las capacidades exactas descritas en la noticia pueden variar en su aplicabilidad actual, es innegable que el progreso tecnológico está permitiendo nuevas formas de capturar información. Sin duda, estamos en una era donde la convergencia de tecnologías podría llevarnos más cerca de escenarios como el descrito por DW.
Así, en vista de los avances en la tecnología de reconocimiento de audio que permite capturar información a través del sonido de las teclas, es importante considerar ciertas medidas de seguridad. Una opción es optar por teclados silenciosos o ajustar la configuración de los teclados para minimizar el ruido de las pulsaciones. Mantener un entorno de trabajo con poco ruido de fondo durante llamadas o sesiones en línea también puede reducir la posibilidad de captura inadvertida. Además, el uso de auriculares con cancelación de ruido puede contribuir a minimizar la captura de sonidos del teclado durante las conversaciones. Es crucial ser consciente de la información que se comparte durante llamadas o videoconferencias, especialmente si se trata de datos confidenciales o contraseñas.
Otros riesgos
La capacidad de las inteligencias artificiales para analizar sonidos y patrones no solo abre la puerta para capturar contraseñas mediante el sonido de las teclas, sino que también conlleva otros riesgos. Esta tecnología podría ser empleada para grabar conversaciones habladas, lo que podría poner en riesgo la privacidad, al capturar información personal y confidencial. Además, al recopilar datos sobre los gustos y actividades de una persona, podría facilitar ataques de ingeniería social más avanzados. La posibilidad de que esta tecnología sea utilizada sin el conocimiento o el consentimiento de los usuarios también plantea preocupaciones en términos de privacidad.
De esta manera, a medida que la interacción con la inteligencia artificial se vuelve más común, es fundamental adoptar prácticas que permitan una convivencia segura y armoniosa. Mantenerse informado sobre las últimas novedades tecnológicas y sus implicaciones en la privacidad es esencial para tomar decisiones informadas. Revisar y comprender las políticas de privacidad de las aplicaciones y servicios utilizados ayuda a mantener el control sobre los datos compartidos. Aprovechar las configuraciones de seguridad y privacidad disponibles en dispositivos y plataformas puede contribuir a reducir los riesgos. Mantener contraseñas seguras y habilitar la autenticación de dos factores agrega una capa adicional de protección. Finalmente, ser consciente de la información compartida en línea y durante las comunicaciones digitales es clave para evitar la exposición no deseada.
Si bien la tecnología de IA ofrece beneficios significativos, su desarrollo también presenta desafíos en términos de seguridad y privacidad. Conforme continuamos avanzando en la era digital, es importante encontrar un equilibrio entre aprovechar las ventajas de la tecnología y tomar medidas activas para proteger nuestra privacidad y seguridad. La educación constante sobre estas tecnologías y su impacto es fundamental para tomar decisiones informadas y fomentar una convivencia armoniosa con la IA y la tecnología en general.
