“La IA en plataformas de conversión, retención y fidelización de clientes juegan un papel ganador porque logran aumentar precisamente los ingresos de una empresa”, señala un experto.
Aceleración de los procesos, más eficiencia, mayor rapidez y ahorro de tiempo. Esos son algunos de los beneficios de la inteligencia artificial (IA) que cada día gana más adeptos. De hecho, esta tecnología ha llegado al ámbito de la salud donde ha permitido, por ejemplo, que se hagan cirugías a distancia.
Si bien, la IA hoy se encuentra al alcance de la mayoría de las organizaciones como herramienta que facilita la experiencia a las personas, aún existen procesos que no han incluido esta tecnología. El camino de los emprendimiento o startups explotó durante la pandemia y hoy vive un complejo escenario económico, y uno de los problemas es la falta de conocimiento y herramientas para combatir la fuga de clientes.
Hace un tiempo, una publicación en Estados Unidos llamada “Welcome to Churn Nation”, conmocionó al mundo de los negocios; las empresas en USA pierden casi US$2 billones cada año debido a la fuga de clientes, esto es más de los PIB (GDP) de Brasil o Rusia. Pero la pérdida de clientes es el efecto de la causa.
Respecto a esto último, Pablo Gallardo, CEO de customerScoops, startup chilena elegida entre las más innovadoras por el Centro de Innovación UC y Startup Chile, señala que, “la fuga de clientes viene de la falta de feedback, data, estrategia y tecnología”. La IA aplicada a plataformas de conversión, retención y fidelización de clientes juegan un papel ganador porque logran aumentar precisamente la conversión de ventas (cross-selling y up-selling), aumentar el engagement, disminuir las tasas de fuga y aumentar el ROI de la gestión de experiencia de clientes”.
“Solo el 4% de los clientes presenta una queja formal, ya sea por mal servicio o no cumplimiento de expectativas, el resto de los insatisfechos solo se irán. Pero lo critico, es que cerca del 44% de las empresas no conocen su tasa de fuga de clientes.”, cierra Gallardo.
Así, la Inteligencia Artificial se está transformando no solo en algo que ocupamos, sino una herramienta que estamos llamados a brindar al resto si proveemos de productos o servicios.
