Por Argenis José González Salas. Abogado. Ex presidente de la Asociación de Escritores del Estado Carabobo.
Ese es el tema del momento y tal vez lo ha sido frente a todas las guerras en todas las épocas. Los métodos usados según los diversos tratados de derecho internacional público siguen siendo utilizables.
Los líderes temen las consecuencias de poner fin a las masacres, los bombardeos, los asesinatos de niños, mujeres y hombres, las violaciones, los robos etc y demás males apocalípticos, que suponen son los efectos de todas las guerras, sobre todo quieren que les garanticen impunidad frente a las bestialidades ejecutadas, hoy en día tema de los noticieros, con videos antes, durante y después de semejantes crímenes.
Por otra parte, quieren negociar el olvido para no ser sancionados. La mayoría trata de justificar sus abominables procederes. Nadie quiere indemnizar a los familiares de las víctimas. Todos pretenden imponer con diálogos, supuestamente justos, la manera de lograr y mantener los objetivos que les llevaron a explotarle la vida a sus semejantes inclusive de su mismo bando y del bando contrario. Todos pretenden declararse triunfadores de su gesta guerrera como el trofeo aberrante que produjo tanta muerte y ruina para la humanidad. Poner fin a la guerra sería lo ideal para alcanzar la paz, la convivencia pacífica y la tolerancia.
